Testamento vital - soneto

Testamento vital



Si vierais que un erial es ya mi mente
​

olvidando familia y amistades,
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si me notáis extraño, como ausente,
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perdiendo cada día facultades,

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si vierais que babeo torpemente,
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que no controlo mis necesidades
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y me hago todo encima de repente
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balbuceando solo necedades,

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si me tornase triste, malviviente…
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¿merezco yo sufrir tales maldades?
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¿porqué ha de soportar mi ser doliente

​

[COLOR=navy]esa infra vida, imitación del Hades?[/COLOR]
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[I][COLOR=navy]Quiero morir en paz y dulcemente,[/COLOR][/I]
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[B][I][COLOR=navy]sabed pues que esas son mis voluntades.[/COLOR][/I][/B]​

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Pues sí, para mala salud ninguna. Es verdaderamente triste llegar a vivir así.
Muy bien escrito.

¿Y lo del TETAMENTO del título?

Abrazos.

 

Gracias por tan rauda visita y por tu descubrimiento de mi "fallo de teclado". Las prisas son malas consejeras. Corregido queda.

Me alegra que estemos en sintonía con lo del "Testamento", y que te haya gustado la forma en que expreso el tema.


Te devuelvo el abrazo con todo el aprecio que sabes que te tengo, Eratalia.

 

Que sentido soneto Juan Ramón, me has sacado los pensamiento a la luz, pues pienso que cuando uno ya se ve imposibilitado en sus facultades tanto mentales como físicas, es mejor tomar otro camino y que nadie lo impida.
Un placer leerte amigo.
Un abrazo.

 

Creo que todos debéramos leer algo sobre qué es eso del "Testamento vital", no nos vaya a coger desprevenidos una situación insedeseable.

Gracias por tu vista y comentario, amigo.

Un abrazo.

 

lleno del poder de la verdad, vaya intensidad leer este poema. Gracias

 

¿Donde hay que firmar semejante testamento?, yo quiero hacerlo. Es verdaderamente lastimoso como de forma antinatural se pretende alargar la vida, más allá de los valores de la pura dignidad humana.
Pienso, mi querido amigo, que tu soneto es una auténtica joya digna del recuerdo.
Aplausos encendidos.
Un abrazo.

 

Eso se dice tambien de más joven,
suena a epitafio de despedida,
la muerte no es el final de la vida,
es saber aguantar sin que te atoben.
Un abrazo

 

¡Ay Juan, triste el poema…! Imagino que es durísimo enfrentar esa condición, pero como amante de la vida debo decir que tenemos la esperanza de un propósito con el valor de nuestra existencia, pues aún si llevamos un enorme dolor a cuestas, podemos testimoniar a otros lo grande que también es nuestra fortaleza. La única barrera para esto es nuestro propio pensamiento.

A veces pienso en personas que fueron realmente firmes en este propósito, por ejemplo, Helen Keller, quien era sordociega o Anita Frank, quien viviendo en la Casa de atrás, observaba un árbol de castaño. Éste le traía esperanza y ella acunaba este sentimiento, aun conociendo el miedo y la crueldad que le significara la guerra.

Gracias por el poema, invita a reflexionar..

 

Las gracias te las doy yo a ti, amigo, por tu paso por aquí y por esas palabras.

Un abrazo.

 

Agradezco mucho tu entusiasta comentario, Luis. sabes bien cuanto tengo en cuenta tus comentarios. Por otra parte me siento muy complacido de que estemos los dos en la misma linea de pensamiento sobre este asunto.

Un a brazo, amigo.

 

Gracias Kike por tu versificado comentario.

Un abrazo, amigo.

 

El dolor puede ser resistido, sin duda , habrá quien lo aguante más y quien lo vea insoportable, todos no somos iguales; pero a lo que se refiere sobre todo este poema, Huella, es a esos momentos en los que la vida pierde tal calidad que ya no es vida, a esos momentos en que ya dejamos de ser nosotros mismos pues perdemos todo conocimiento ymemoria, cuando somos como vegetales a los que mantienen con tubos : así no, así no viviría yo.

Gracias y un abrazo.