Tiempo perdido

Tiempo después de letras, tiempo no perdido en el silencio, momentos de dejar de escribir, y de volver de nuevo, tiempo para todo, y sin tiempo para nada.
Mensajes antiguos, mensajes de ahora, la misma persona y el mismo corazón, pero con los ojos distintos, con el puño apretado, y dentro, mi alma atrapada.
Que ridículo pensar en el tiempo, en un hola o en el adiós, si cada hola termina irremediable en una separación.
Que tonto el que piensa que siempre es lo mismo, que perdida de vida esconderse muerto de miedo por el futuro dolor.
Tiempo sin letras y solo hechos, tiempo en los que los besos son frases enteras, tiempo en el que cada abrazo es un mundo, y un siglo intentar describirlo.
Tiempo en el que una sonrisa no es una palabra, es sólo una sonrisa, y tiempo en el que el silencio no solo otorga y da vida a la persona.
Que extraño pensar en un mañana, y no vivir el presente, como si ya estuviera perdido, como si el plan fuera más importante que el hecho.
Que raro pensar que necesitas escribir lo que vas hacer y no hacerlo sin más. Que estúpido no reaccionar, y pensar que “mañana será”, “mañana lo haré”, “mañana”, “mañana”, “mañana tal vez”.
Okr

 

Fluidéz y coherencia en el tránsito por el amor, el tiempo y otros asuntos existenciales, bonita y serena meditación que te invita e entonar una suave melodía, que se deja leer con ritmo, y se sigue hasta la última letra con suave cadencia. . .Eres, además de escritor, poeta. Bienvenido y adelante.

 

Te agradezco tu palmadita en la espalda, aunque he de decir que muy a mi pesar, estás equivocada, y sintiendo dentro que tengo un alma rabiosa por escribir atrapada, pero aún así, no soy capaz de verme a mi mismo con ese nombre con el que una persona sería de la mejor forma posible, etiquetada.
Me cuesta hasta pronunciarla, y decir poeta es mucho, tanto que estoy seguro que en mis palabras se puede encontrar cualquier cosa, incluso puedes sentirte identificado o identificada, pero de ahí a encontrar más, sería difícil.
Gracias de nuevo por tan agradable gesto de llegada, y no cabe duda que he recibido el mayor calor que pudiera haber esperado, y hace honor a su nombre tu fantástica bienvenida.