Toda tú

En los dobladillos de tus párpados,
en los "claros oscuros" de tus formas,
en las selvas de tu piel,
allí conservo mi camino.

En las marcas de "tus descalzos",
en tus uñas teñidas, o neutras,
en lo liso y frío de tu carné;
ahí me tiendo, y no sé de miedos.

Pero en la cima de tus lomas,
en los marcos sin jardinero
de tu cuello;
como un aro de oro,
al final de tus orejas de pétalo;
allí me meso.

Todo tu espacio,
irregular y oloroso;
vivo, e inquisidor de mis latidos,
me sabe a año fértil,
a bocado de oxígeno.

 

Un sabor muy reconfortante cuando se nos hace conocido,
placer acercarme a tus letras en mi noche de estar Deisak,
gracias por compartirlas. Besitos apretados en tus mejillas.