todo pasado.

Llego el día, en el cual los pensamientos han de desaparecer.
Por eso dormimos y creamos realidades nuevas o también suceden solas.
Aunque exista la incredulidad, en este mundo.
Nunca dejas de pensar en algo que no existe.
Si no que hay que coger arcilla y darle forma para que tenga vida.
Todo pasado queda en tus manos, aunque el presente se quede.
Las manos pesan de aguantar situaciones, aunque tu mente olvida lo que cree conveniente.
Si diéramos la vuelta a los órganos en nuestro cuerpo como el corazón.
Estuviera en la cabeza todo seria mas sencillo y la cabeza en el lugar del corazón.
Todo tendría coherencia.
Tanto cada palabra como acto.
Alguien pensó que con tanta sencillez no se podía dejar de caminar.
Ya que las manos el cuerpo el alma, todo tienen memoria.

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Muchas veces he pensado con el corazón y sentido con la cabeza, bueno es una forma de hablar claro, pero la encuentro positiva, acercar como bien dices la racionalidad a la víscera que tantos quebraderos nos da y acercar el corazón a la mente para no ser tan calculadores...
Tiene sentido que tengamos esa memoria, nuestra genética es precisamente eso.
Muy interesante tu poema, es genial la poesía que permite compartir tanto...
Felicidades!

Palmira

 

Esa frase es genial.
De hecho, deberíamos preguntarnos si alguna vez pensamos en algo que existe, si hay realmente una semejanza real entre nuestro modelo mental del mundo y el mundo en sí...