Trescientos sesenta grados

Resolver lo propio
para no comer lo ajeno
Centrifugando en su movimiento
la claridad despeja el cielo

Tormentas en axpas
Los pajaros no recitan
repensando en ascuas

Insegura reluce la primavera
Incierta su suerte
abandona el resultado pero no su esmero

La buena vertura del tiempo
da la completud del puzzler
que estabas haciendo

El cantaro se lleno en el pozo
La luz resplandece en el agua clara
El lago alimenta a la montaña donde descansa

El andariego presume de no llevar espada
porque su corazón se manifiesta
en una sonrisa que le salva

El candor del amor
enciende el candelabro
auyentando la oscuridad de la noche

Mundos entreverados
de la mano anudados
para realizar lo contratado

Buen auspicio confiar
en el amanecer del rey Helio
y en la receptiva paz de la reina Artemisa


02/05/2022
©Dikia