tu piel

Apareciste delante,
y sentí algo que no conocía,
una flor en el asfalto,
delicada belleza para la vista.

Me podría perder en tus ojos,
y quedar prendado de tu sonrisa,
acariciar tu pelo,
recorrer con los dedos tus mejillas,
con miedo a estropear lo que ya es perfecto,
rozar suavemente tus labios,
y acercarme a probar tu cuello,

Cómo decirte que eres bonita,
si se me escapan miradas furtivas,
me perdería en tus ojos,
pero no me culpes por bajar la vista,
el reclamo de lo prohibido,
no puedo olvidar tu cuerpo,
y no caminar hacia el paraíso.

No quiero esperar,
impaciente por descubrir que hay más allá,
quiero encontrar tus manos,
que aprietes las mías,
subir por tus brazos y acercarte.

Sentir tu respiración,
y rodear tu cintura,
no puedes pretender que me aleje,
si tu cuerpo me dice que quede.

Deja que me acerque a tus labios,
y que tu respiración me hable,
que me hable de placer,
que me diga donde llevar las manos,
que sobren palabras y hable la piel.

Deslizarnos entre las rejas de la ropa,
tímidas caricias de pasión contenida,
susurros de silencio al oído,
que tus ojos me atraviesen,
que me pidan que te lleve conmigo.