Un día cualquiera

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Amanecer con los ojos confundidos por otro sueño inalcanzable mientras del otro lado de las paredes de mi habitación todo parece estar en orden, las personas hacen sus rutinas matutinas y el sol brilla en lo alto. Tirado y enrollado en mi cama escucho las agujas del reloj girar cada vez más lentas, otro día comenzaba. Recorro las calles en busca de distracción, despejar mi cabeza es el objetivo y en menos de un segundo de vuelta al mundo oculto en mí. Preguntas rondan mi mente, ideas también unas para mal y otras por suerte para bien, creer y no creer es algo en lo que difiero, las personalidades se potencian dependiendo del material que poseemos? O acaso serias el mismo con 2 billetes o un millón en tu bolsillo? Realmente todos vamos tratando de ser quien queremos o solo estamos aquí para comprar? Porque la gente solo ve lo que quiere ver, si todo es una sola gran fuente de poder, en un parpadeo sigo mi camino, me di cuenta que falle y vuelvo a intentar. Pasaron casi 7 horas desde que desperté, me mantengo al margen no quiero fallar otra vez. De pronto algo llama mi atención, una discusión entre estrellas del barrio por ver quien tiene mejor auto. Y es que algunos chicos no lo notan tan solo pasan por aquí como turistas, en las noches, con sus bebidas, pero no conocen el verdadero dolor. La juventud cegada por alcanzar la gloria, con sus fiestas nocturnas y chaquetas negras, pierden credibilidad, pierden noción de la realidad y solo buscan tener aun más. Vamos enfrentémoslo mientras tú eliges lo que quieres, niños no tienen el derecho a la educación y ahí es cuando la cambian por armas. Violencia política nos invade, para ganar las elecciones hago trampa y después de ello no cumplo las promesas, autentico fantasmas nos gobiernan. Pasan las estrellas y dejo descansar mis ideas, esas que no puedo controlar. Es de noche y me bajo al parque la luna me saluda y quiero saludarle, de repente una visión tuve, la chica que vi anoche en la calle de la mano de su amor la encontraba en la misma situación, y comenzaban las preguntas. Todo eso de amar existe? Por qué se confunde costumbre con cariño, felicidad con soledad y dependencia con fidelidad? Simplemente me pregunto por qué. Es necesario mentir para sonreír? Vivimos en un mundo confundido, en el cual sigo perdido. Seguí observando aquella escena y algo no entendía, aunque se decían que se amaban se engañaban otros días, y si, no era el mismo amor de la calle y él quizás lo sabía. Son las familias del futuro las que se arman entre mentiras, pagando después el precio los niños viviendo en dos casas, en dos familias. Sé que allá afuera hay alguien que me entiende lo que digo, son circunstancias de siempre, productos del olvido, solo espero que el dolor no eclipse el verdadero amor. Vuelvo a casa luego de aquella extenuante jornada, me acuesto en mi cama y lo único que hago es reflexionar pero ahora sobre mí. En un continuo quiero y no puedo solo pienso en descansar, verás el sufrimiento volviéndome loco, no entro en mi propio cuerpo, silencio y me dejo llevar. Por eso estoy ahora con los ojos cerrados y subido alto, muy alto cerca de donde se guardan los deseos y comienzo a soñar.