Un día gris, nublado y lluvioso

Que hermoso está el día pensé
Me levantó de madrugada el sonido de la lluvia
Aunque parezca que el cielo está de luto
Solo derrama lágrimas de vida sobre la tierra

Vino a mi memoria el recuerdo de algunos años
Pensé en lo mucho que odiaba un día de lluvia
En mi interior había frío, dolor y lluvia melancolíca
Y la felicidad se me ahogaba sin un salvavidas

Ahora tengo una balsa hecha de mís lágrimas
Gracias a ese sufrimiento que pude superar
Ahora puedo flotar sobre cualquier malestar
Mi alegría ahora puede contemplar la belleza del azul

La melancolía ahora me permite apreciar la felicidad
La felicidad solo se valora con la melancolía
Hoy no tienes, hoy contemplas la soledad
Mañana tienes, sonríes, abrazas la verdad

Es un día gris, nublado y lluvioso
Pero que importa, hay que disfrutarlo
Porque acostado viendo al techo
Uno se pierde tan maravilloso espectáculo

Prepararé un té, me abrigare un poco
Escribiré un verso, recordaré un beso
Pero no sufriré por la ausencia
Es un día que merece mi alegría

GabrielCuervo
15/04/2018
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Que hermoso está el día pensé
Me levantó de madrugada el sonido de la lluvia
Aunque parezca que el cielo está de luto
Solo derrama lágrimas de vida sobre la tierra

Muy romántico, sentido y melancólico poema. Me ha gustado mucho estimado Gabriel. Un cálido abrazo.

La melancolía ahora me permite apreciar la felicidad
La felicidad solo se valora con la melancolía
Hoy no tienes, hoy contemplas la soledad
Mañana tienes, sonríes, abrazas la verdad

Por cierto estos versos son muy verídicos y ciertos.

 

Que hermoso Gabriel, " aunque el cielo parezca de luto, sólo derrama lágrimas de vida sobre la tierra! esta frase contiene la esperanza que se aprende después del dolor!! Saludos y abrazos enormes!!

 

Gracias por tu tiempo al leer mi poesía, saludos cordiales y un fuerte abrazo.

 

Coincidimos tú y yo en la lluvia, en la melancolía amiga y en ese té que reconforta. Me ha gustado mucho tu poema porque no es triste ni alegre sino todo lo contrario, se deja leer con suavidad y a mí me ha llegado muy adentro. Un abrazo amigo Gabriel. Paco.