Un sueño enmarcado

Tras tantos inviernos,

mis sentimientos se atenuaron,

pensar en ti ya no era un abismo de nostalgia;

y ya no era trágico no haber sentido nunca tu beso,

no haber llegado tan profundo en tu corazón,

y la resignación me resguardó,

de mi engaño auto infligido.


Hoy abrazo tu recuerdo junto a la aceptación,

y las notas azules ya no me queman,

tan solo me advierten que no te has ido,

que no te irás,

pues mis ojos enmarcaron tu rostro

y mi cariño a tu nombre

y sus letras eternas.

 

Bello poema... que nos envuelve con la intensidad de vuestro personal sentir.
Cordialmente:

 

Hay sueños que dejan de doler a pesar de nunca hacerse realidad, a veces es mejor
archivarlos en un rincón del corazón y poderlos sacar de vez en cuando a tomar aire
ya sin tristezas ni rencores. Me gustó mucho tu poema que nos relata ese momento
tan importante en que logramos sanar el alma. Besitos cariñosos vuelen a tus mejillas.

 

Gracias por leer, ¡Un abrazo a la distancia!

 

Feliz de que reflejara transparente mi sentir el poema, gracias, he recibido los besitos cálidos, un saludo.