Un vaquero ruidoso.

Seis tiros hay en mi revólver,
pero mis cuentas son otras.
Si en "Bonanza" no recargan,
por qué debería romper
esa costumbre milagrosa.

Algo de pena tengo,
por los indios malheridos.
Las reglas son así,
nunca podrán ganar
pieles rojas ni bandidos.

Mi caballo de madera
no es "Tigre" ni "Plata".
Se llama "Rocinante",
suprema concesión
que mis abuelos me sacan.

Voy a suspender la guerra
en honor a las visitas.
Si me porto bien,
antes de irse,
me devuelven las cebitas.

 

Que manera de escribir tienes, que magia despiden... Muchos de ellos con esos temas que hacen revivir la inocencia de la niñez y nos transportan a la felicidad a traves de tu Magia! Un abrazo Amigo y mi admiracion SIEMPRE.

 

Me hiciste recordar con tus versos aquella pelicula del Oeste "Bonanza" que magia tienes en tu pluma. ABRAZOS

 

Es la niñez, lo mejor que tenenos. Grácias por tus palabras.
Luis.

 

El chiste entre mis amigos de la infancia, era que en "Bonanza" habían festejado el tiro un millón, sin recargar jamás alguno de sus revólveres. Estas líneas son un sincero homenaje a esos tiempos tan inocentes. Mi sincero aprecio para ti.
Luis Elissamburu.