Una fábula de amor

Cuenta una historia remota
que tres muchachos amaban
a una jovencita hermosa
por la cual todo daban.
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El primero era muy rico
con una cuenta llena de ceros
él le ofrecia toda su fortuna
pues es atractivo el dinero.​

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El segundo de clase media
de muy respetable posición
le ofrecia un buen hogar
y además su corazón.​

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El último era muy pobre
humilde, de baja condición
lo único que podía ofrecerle
era darle todo su amor.​

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Ella no podia decirdirse
¿Cuál debería ser elegido?
Así que les dio una prueba
quien la realice sería escogido.​

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El que trajere la rosa más bella
su amor entero se ganaría
ellos quedaron de acuerdo
entonces pactaron el día.​

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Los dias pasaron volando
de pronto la fecha llegó
los tres traían sus rosas
bastaba saber el ganador.​

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Sortearon el orden de presencia
primero el rico y el de clase media
por último le tocaba al pobre
y comenzó así la prueba.​

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El rico traía una rosa de oro
de uno de los metales más bellos
alegando que su significado
era el del amor eterno.​

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El de clase media traía una rosa
una muy bella, roja y natural
diciendo que así sería su amor
con buen perfume para el hogar.​

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El muchacho pobre presentó
una barata rosa de papel
hecha de periódicos viejos
una que había hecho él.​

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Los otros dos se rieron
de tan patético regalo
y empezaron a discutir
cual de ellos había ganado.​

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Pero él entonces les dijo
no tengo oro para fundir rosas
y cualquiera obtiene una natural
pero esta que hice es más hermosa.​

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Tiene mejor significado
y además es la mas bella
pues significa mi amor
y que hago todo por ella.​

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Pues si no existiese algo
se lo haría con mis manos
le ofrezco todo lo que tengo
lo que no tengo y mis te amo.​

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Porque aunque no tengo dinero
la comida no ha de faltar en la mesa
y ella no será solo un trofeo
que solo por ego me interesa.

Trabajaré y con mis manos
he de darle un futuro estable
seré su amigo y confidente
y con los niños un buen padre.

No voy a cortarle las alas
la apoyaré en sus empresas
juntos los dos creceremos
y esa será nuestra riqueza.

Mi corazón es sincero
le ofrece estabilidad y fidelidad
y si es que yo no soy el elegido
solo deseo, que sea amada de verdad.

La muchacha lloró de alegria
y deshecho a los dos primeros
les dijo que aquella vanidad
no significa un te quiero.​

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Y se caso con el muchacho pobre
y escuché por ahí segun dicen
que han pasado muchos años
y hasta hoy en día viven felices.​

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Esta es solo una historia
pero un mensaje regala
el amor nunca se compra
el amor es algo que se gana.

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Las historias que se cuentan siempre acaban bien, otra cosa es la vida real. Por desgracia la belleza no va en el interior, sino en el color del dinero.
Un placer.
Saludos.