Una gaviota cuentista

Una gaviota cuentista.

Vuela

escribe sobre la nube.

Uno dos.

Ritmo de alas.

Escribe.

No sé qué verso

no sé a qué amante.


Enfrente tú,

tu piel,

tu ignoto subconsciente,

tu mirada ,

tu silenciosa mirada,

muda como un árbol,

tu mirada fija,

callada como un pez,

y yo,

el silencio,

nosotros,

como fuera del tiempo,

tan sólo un latido,

en el eco de la ciudad,

y aquí, nosotros,

un amor que la brisa

no quiere deshacer,

y abajo el paseo espera,

un cauce de dulzura en el puerto,

pero arriba nosotros,

tú, con tus pensamientos líquidos,

nosotros mirando abajo

hacia aguas drogadas en sal,

la piel del mar,

y debajo de las olas

todo el mar,

tus pensamientos,

como el subconsciente del mar.


Si dijeras algo

cada palabra sería una luciérnaga

en esta luz sin dueño.


Sigues callada.


Cada palabra sería una perla.


Tengo que marcharme, irrumpes.

La mariposa que arde en mis huesos

se hace de piedra.


La calle, el paseo, el puerto,

mientras el sol,

disolviendo va

nuestras sombras.

...
..
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Jesús Soriano

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