Una respuesta a la soledad no correspondida

Ni haz de luna ni as de espadas

Serán suficientes

Cuando el trueno cese

Las magnolias sean oscuras

Y cada planeta que encuentre

Se halle exterminado.


No rezaré ni por mí ni a nada

Cuando cabalgue por senderos olvidados,

Hable con mis ojos a los muertos,

Me vuelva cuerda en la canción de la vida

Y encuentre una elegía en Alejandría.


Tú sabes bien que odio peinarme,

Ser igual todo el día

N o sentir dolor

-Para sentirme vivo-,

Y estar quedo

Cuando pienso cuántas vidas he vivido


Déjame llorar en este pasto tibio,

Que estoy lejos de la mar

De los granados de Andalucía

Del resquicio chiquito de mi amor…

Que estoy lejos de ti y de nada más

 

Me gusta, me agrada lo que en él dices pero sobre todo como lo dices, sensibilidad y talento amigo Velkolkof vislumbro en tus versos. Abrazote vuela. Paco.