Valioso dinero.

No sé qué más contarte...
Lo he dado todo.
Somos compañeros. No te fallaré. Pero no puedo comprarte.
Figura de barro y lodo.


¿ Cuánto vales ? ¿ Formarás parte de mi colección ? O eso es un abuso...


Prefieres ser ángulo agudo, a recto u obtuso.
No te abriré; tranquilo.
Sigue, como melocotón en almíbar, dentro de tu lata de conservas.
Mi furia manejo. No me enervo.


No soy energúmeno que rompe vasos y platos. No quiero caer por las escaleras.


A cada cerdo, le llega su San Martín.
Estuvo bien, mientras duró.
Somos seres, actuando en un sin-fin.
Al parecer, la meta es la búsqueda. Nunca terminamos de aprender.





Pero si quieres aprender, enseña. Eso decía Cicerón.


Luego por tanto, nunca acabamos de enseñar. Tenemos vocación docente.
¿ Qué me vas a mostrar, hoy ? Imagino que el buen camino.
El sendero...
Me dirás que te dé todo mi dinero. Como el dinero es malo, y la gente, buena...


Pues yo soy un santo inocente, y tú te enriqueces, alegremente.