Versos del alquimista

Creía firme en lo que carecía ensimismado autócrata,
creí lo que fui y lo que fui yendo que ahora vomito,
era medusa anacrónica con ramos de futuro,
el contacto intimo del inti en mis lilas neuronas,
era toda la noche en que palpitaba de mas el pecho.

Fui una sonrisa ansiosa que miraba en los ojos silentes,
una sombra del camino dispersa por la luz,
era lo que era antes de ahora,
era anestesia que detenía por ratos esta fiebre decúbita.

Nunca he entendido del todo la química y sus manifestaciones:
los boyantes enlaces, el positivo y negativo haciendo dupla.
las dos partículas que se enredan de brazos y son una y ríen felices,
ni comprendo como un elemento podría transmutarse en oro,
solo veo la oxidación entre mis huesos que se irán a polvo ocre,

Era lo que era antes de reencontrarme con mi trigo oro,
mirar las paredes de la mina conquistada por un industrioso ajeno,
resguardado el oro en otro pecho que no lleva mi inicial,
era lo que era en el dislate de mi voz callada antes de mi entierro en la mina.

Perdí de buena vez y por todas las posibles mi única joya de valor profundo:
ni intelectual ni moral ni tangible solo profundo en serio,
perdí el todo en jugo de miradas que me enseñaron la verdad presente,
se fue todo en otros sacos, y quede solo, enterrado en la vieja mina.