Vieja Herida Mortal

El filo traidor de tu lengua me hizo una llaga mortal,
Dejando una herida profunda que no quiere cicatrizar;
Es una lesión vieja que aún duele como si tuviera sal.

Mi alma sangra profusamente y no me deja descansar,
A veces llora por las noches y otras no para de rezar.
Queriendo dejar de sangrar, queriendo dejar de pensar,
Queriendo empezar a reír y tus recuerdos borrar.

Alucinando que empiezo a vivir estando tranquilo y en paz,
Durmiendo al fin sin ti, en ese sueño eterno del que nadie regresa jamás...

 

Otro verso triste.Sin embargo bien llevado.Saludos.