Viva Presencia

Blanca como la nieve,
caliente cual agua tropical.
Lúcida y proclive
a desaprender amar.

Cabellos de azabache,
ojos anclados en la profundidad.
Musa que sobrepasa mis alcances
y sin saberlo me da felicidad.

Finos labios que endulzan el silencio,
anónima seriedad.
Corazón fiel que madura el sueño,
colmo de austera sobriedad.

Risa inaudita,
que me gustaría escuchar.
Suerte solícita,
que de alegría me pondría a cantar.

 

un placer conocerte y pasear por tan bello poema
esos finos labios que endulzan el silencio me encanto
mis humildes felicitaciones admirable poeta.

 

hermosas rimas amigo con ese toque encantador de siempre si que esta viva esa presencia en cada verso que plasmas.
abrazos felicidades.