Vivamos todos en paz...

Yo que veo…no quiero ver,
lo que a mi país le está pasando…
Yo que leo…no quiero leer,
lo que en los periódicos escriben a diario:
sobre muertes, sobre asaltos, sobre el hambre,
y especialmente
sobre la discordia entre hermanos.

Yo que puedo oír…no quiero escuchar
nunca más los comentarios:
“que si hizo esto aquel burgués”,
“que si hizo esto aquel revolucionario”.
Yo quiero escuchar que en mi país,
todos somos hermanos
que hay espacio para todos,
¡y que con trabajo, si podemos superarnos!.

Yo que tengo boca…ya no me como el cuento,
de que si hay que acabar con el que tiene terrenos,
con el que tiene una fábrica,
porque si es catire no es bueno;
y si el odio me salpica
mantengo el pensamiento sereno.

Yo sólo quisiera, que los niños de mi tierra supieran:
que tenemos un país hermoso
bendecido por la naturaleza,
que nacimos de muchos…
y que tenemos una gran historia a cuestas;
que somos fuertes, y que juntos,
podemos enfrentar lo que venga;
que la clave o la salida,
no tiene que ver con el odio
ni con llegar a ser genocidas…
tiene que ver con el oprobio,
de hacer el ridículo,
de someter los sentidos,
de olvidarse los escrúpulos
o ponerle un bozal, hasta al amigo…
de engañar…y de pensar…
que el pueblo se compra con mimos…
cuando el pueblo se compra con pan,
con trabajo y con cobijo.

Ellos deben saber,
que todos tenemos mezcla de sangre en las venas:
sangre española
sangre indígena
sangre morena…
que somos un pueblo de mestizos,
pero de oportunidades abiertas;
amantes de la calidez,
de la buena comida y las fiestas;
que somos creyentes y de buena fe
aunque ahora a nadie le parezca.

Yo que tengo brazos…prefiero luchar,
con trabajo, honor y dignidad;
defender mi propio espacio
donde se me pueda respetar…
no porque inspire miedo,
temor o fatalidad…

Yo que tengo ojos y cerebro…
prefiero escoger lo que ver,
y pensar, mi propio pensamiento…
quiero ser madre de mis hijos
y abuela de mis nietos,
no quiero que sean copia de algún extranjero,
sea cual fuere el secreto.

Yo tengo mis propias ideas,
aunque con respeto escucho lo ajeno,
no soy de las que piensa:
“pónganme donde hay, donde está lo bueno”…
Y aunque necesidad siempre hay,
prefiero decir: “síganme los buenos”.

Aunque debería decir…
escúchense a sí mismos
a su conciencia, a su yo interno,
tápense las orejas,
o griten más fuerte que ellos;
apretémonos los cinturones,
que como hermanos,
todos juntos venceremos.
Esta lucha no es por pan,
esta lucha no es por dinero;
esta lucha es por poder pensar
libremente y no con miedo…
miedo a que si no voy…
pierdo el pan,
o pierdo el empleo…
Pero perder la capacidad de pensar,
y de honesta y libremente actuar,
no es lo que para mi deseo.

Vivamos todos en paz,
que somos hermanos primero…

 

A pesar de que no vivimos en el mismo país... me sentí muy identificada con tu escrito, países que pareciesen hasta cierto punto el mismo... contradictorio... me gustó tu naturalidad al expresar semjantes sentimientos tan profundos... un placer como siempre leerte Ladime... hasta pronto!..

 

Te encuentro la razón y solo digo . Gano democraticamente las elecciones y todo lo está haciendo bajo las leyes democraticas, entonces ! cuál es el problema! No hay que hacerle el juego a los ricos y medios de comunicación controlados por ellos. Si equivoca el rumbo el pueblo que lo eligió lo derrumbara .

 

Uhm...
Desgraciadamente es así, las luchas sobrevienen, losproblemas nos enfrentan con nuestros hermanos y el amor y la paz se deja para después, para cuando seamos menos...

Un beso linda

Eugenio

 

La paz parece estar devaluada..
a veces quisiera chocar
con algun asteroide
para asi despertarnos..
Si señora mía hay que luchar..
hablar gritar
no quedarse con los brazos cruzados..
vivamos en paz.. ese sueño ... idializado.:S
un gusto pasar Bella:::hug:::
Saludos​

 

Hermana!!! que hermoso sentido de pertenencia y de hermandad. Un placer heberte leido. Aunque mi comentario tenga sangre indigena. Un abrazo, miradas y milenios de besos para ti.