viviendo con un demonio

antes de que llegaras a mi, soñaba contigo
imaginaba como seria el compartir el tiempo juntos
me repetía muchas veces que seria maravilloso
¿Qué tanto estaba equivocada?

aun sin conocerte te recibí con mucha alegría
después de tanto esperar, al fin estabas aquí,
te enseñe mi casa, y te di mis cobijas
te agradecí por haber llegado a mi vida.

no paso mucho tiempo antes de que mostraras tus colmillos
y sacaras tus garras, no paso mucho antes de que me lastimaras,

en medio de gritos y manotazos logre calmar tu furia
pero yo ya estaba demasiado asustada,
por la mirada en tus ojos estoy segura que eso era lo que buscabas,
no podia dejarte suelto en mi casa,
no podia dejar que destruyeras mi hogar
así que me arme de valor y te sostuve entre mis brazos
y como pude te puse en una jaula

después de curarme las heridas
pregunte ¿por que lo habías hecho?
no alcanzaba a entender como había pasado todo eso

lo pensé por mucho tiempo mientras contemplaba la noche
si te devolvía no se lo que harían contigo
yo era tu única esperanza
decidí entonces que cuidaría de ti
hasta que llegaras a quererme tanto como yo a ti

¿Qué tan equivocada estaba?
sin pensarlo acepte un demonio en mi casa
estoy aterrada, no paras de odiarme
no paras de lastimarme, no paras de atacarme
ya no puedo contar cuantas heridas tengo
ya no puedo recordar cuantas veces e llorado
ya no puedo pensar con claridad

pero tampoco puedo abandonarte
no quiero hacerlo,
yo soy tu única esperanza,
y tu...
probablemente, el demonio que me quitara la vida.

 

Vale la pena preguntarse si se debe pagar una vida por otra.
Demonios como este los hay por doquier, es natural
lo realmente malvado del asunto es mantenernos vulnerables
a su naturaleza.
Un gusto pasar por sus historias.
​

 

Magnífica obra espléndida de admirable inspiración.