Vivo fragante y porquero. Décimas.

Vivo atento y sin demora

a la luz del nuevo día

destruyendo la apatía

que me ataca retadora.

Vivo donde correctora

la Verdad se hace evidente

derramándose candente

como bendición posible

que llega de lo invisible

hasta mostrarse presente.


Vivo siendo partidario

de mi Selene asesina

que a la vez que da estricnina

me da verso libertario.

Vivo donde lapidario

el cincel deja escritura

negra por verter oscura

lo que suena en lo profundo.

¡De la oscuridad del mundo

surge lírica dulzura.


Vivo al sur de mi destino

perentorio y transitado

por el ripio que inmolado

se me entrega repentino.

Vivo donde el desatino

presta soles y amargura

a quien preso de cordura

y alejado de su esencia

se convoca a la presencia

de hacer su propia andadura.


Vivo al pie de la excrecencia

bien abierto al Dios que quiere,

a la fe que me confiere

placidez y consistencia.

Vivo con la contundencia

de andar andando sendero

entre un brillo placentero

y la noche que me abraza

conteniendo la amenaza

de hacerme su prisionero.


Vivo fragante y porquero.

03/03/2018

 

Como Torbe, que vive en Villa-Cerda.
Torbe ama el fornicio.
Yo prefiero el arte, por no helarte.