Volví al mismo sitio, pero tu ya no estas.

Quiero dejar de sufrir,
la veo en el río,
me acerco y callaron las farolas mis pasos
hasta su espalda.
Con una sonrisa, y lágrimas
en mis oscuros ojos,
me acerqué a tu oreja y dije la frase que tanto
te gustaba.
Aquella frase quedó en el río,
el amor ya no me ahoga, conseguí olvidarlo,
sin ti no significa nada.

Reír, y tu boca más traviesa,
sentir un beso en mi mejilla
cada mañana,
beber el agua de tu ombligo,
leer los versos prohibidos.

Volví al mismo sitio,
pero está vez sólo,
y en mi cabeza esa frase.
"siempre estaré a tu lado,
siempre estarás aquí conmigo".

 

Bonito poema, adornado con imágenes brillantes,
una historia que suena a verdadera.

 

Bonita y tierna historia, me gustó es dulce pero sin empalagar.
Saludos