1. Invitado, ven y descarga gratuitamente el cuarto número de nuestra revista literaria digital "Eco y Latido"

    !!!Te va a encantar, no te la pierdas!!!

    Cerrar notificación

Y ella no me sentía.

Tema en 'Prosa: Amor' comenzado por Kiko Cabanillas, 30 de Julio de 2017. Respuestas: 0 | Visitas: 322

  1. Kiko Cabanillas

    Kiko Cabanillas Poeta asiduo al portal

    Se incorporó:
    5 de Abril de 2016
    Mensajes:
    348
    Me gusta recibidos:
    200
    Género:
    Hombre
    Eva: La conocí en el COGAMI: Centro gallego para minusválidos.
    Pronto nos hacíamos uña y carne.
    Ella padecía una paraplejia que la mantenía en silla de ruedas.
    Yo tan sólo dificultades en la marcha debido a un TCE sufrido hace ya veinte años.
    Yo, bastón. Ella silla de ruedas.

    A Eva le gustaba el flamenco, que yo adoro. Y la poesía, que es mi vida.
    Ese día quedamos en que yo la iría a buscar a su casa. Tenía el ascensor adaptado para su silla.
    Para las escaleras del portal tuve que desmontarla de su silla y luego volverla a subir.

    Operación que repetimos al llegar a mi casa. Un taxi adaptado nos llevó hasta allí.

    Ya en casa cocinamos. Yo había hecho previamente la compra: Una merluza maravillosa y zamburiñas.

    Mi trabajo con los discapacitados -como yo- había comenzado años antes; gracias a María, a quien conocí trabajando de voluntario con la ONG Aire para un envío de ropa a los campos de refugiados para Grecia.

    Seguimos quedando Eva y yo. Hasta que un día en mi casa ella me propuso mantener relaciones sexuales. Me explicó: Te practicaré una felación sin problemas y luego me tumbas en la cama y me penetras. Siento darte instrucciones, pero es imprescindible.

    Fue un éxito.
    A partir de ese día numerosos fueron los días en que yo iba a buscarla a COGAMI y de ahí nos trasladábamos a mi casa.

    Pero cuando realmente me enamoré de ella fue cuando un médico me dijo que sin lugar a dudas ella no sentía nada manteniendo relaciones sexuales conmigo.

    Mi próxima meta es dejarla embarazada y si ello no fuera posible adoptar un hijo para que consolide nuestro amor.

    Ella amaba a otro hombre: Miguel Poveda. Era su dios. Y el mío Camarón de la Isla.
     
    #1
    Última modificación: 30 de Julio de 2017

Comparte esta página