Y no hallarán confines

NO HALLARÁN CONFINES


Serán las golondrinas tus mensajeros

para templar los fríos invernaderos;

y llenarán balcones alados nidos

removiendo las ondas con sus silbidos;

y ya la primavera por los trigales

para que todos brillen originales;

así de las palabras haremos los jardines

querrán desabrigarlos y no hallarán confines.


eduardocarpio

3 de marzo de 2013
​

A Cisne —Ana Cevallos—sin olvido

(octava dodecasílaba 7+5, en la que los dos últimos son alejandrinos al modo que el maestro Rubén en ocasiones nos regaló)

 

¡Cuantos poemas, estimado Eduardo, hacemos ultimamente con melancolía y tristeza por añoradas ausencias.

Son estas unas hermosas octavas cuyo formato de seis versos dodecasílabos y dos alejandrinos eran desconocido para mi. Espero que lleguen a Ana y que sepa que el olvido no entra en nuestros cálculos.

Un abrazo, amigo.

 

Eduardo Carpio
Se me han humedecido los ojos al leer esta Octava que me habla de tu corazón sensible. Quise escribir algo digno de ti y mi musa se ha perdido, por ello te dejo estos sencillos versos libres, sin más pretensión que expresarte mi gratitud infinita. ¡¡Gracias desde mi corazón!!

En este marzo impregnado de lluvia
la pluma se niega a desgajar poesía,
mas descubro presagios primaverales
en los jardines cobijados de letras,
en los balcones rozados de golondrinas,
en la mansedumbre de tu orilla.

Bien sé amigo poeta,
que en los pliegues del viento se esparcirán mis huellas,
y crecerá el silencio como crece el olvido…

Mas mientras exista un latido, una nota, un sonido,
en la gratitud de la memoria reposarás intacto,
como signo de luz al final de la noche,
como espigas florecidas en mis manos.

[I]Ana Cevallos Carrión.[/I]
[COLOR=#76923c][I]Loja, 03 de Marzo del 2013.[/I][/COLOR]


[SIZE=4][COLOR=#76923c][B][I]A todos mis compañeros y amigos: Perdonen que no me haya despedido, porque decir adiós siempre me ha costado. Sentí que he cumplido un ciclo en esta casa y debía renovarme. Gracias por haber compartido conmigo en alas de la poesía, fue un honor para mí, y a todos y cada uno de ustedes les deseo suerte y éxitos y sé que los senderos de las letras en algún momento nos harán coincidir. [/I][/B][/COLOR][/SIZE]
[FONT=Garamond][SIZE=4][COLOR=#76923c][B][I]Abrazos del tamaño de mis alas.[/I][/B][/COLOR][/SIZE]
[FONT=Garamond][SIZE=4][COLOR=#76923c][B][I]Ana



[/I][/B][/COLOR][COLOR=#000000][FONT=arial][SIZE=3]
Post autorizado por la administración. [/SIZE][/FONT][/COLOR][FONT=arial][/font][/SIZE][FONT=arial][/font][/FONT][/FONT][FONT=Garamond][FONT=arial][/font][/font]

 

Muy bonito tu poema como anunciando la primavera
Muy logrado técnicamente. Encantada de leerte amigo

Salufos afectuosos

 

Excelente esta octava, estimado Eduardo,
plena de sentimiento y melancolía;
estrañaremos a Ana, una excelente poetisa.
Interesante la variación final,
un saludo cordial,
Eduardo

 

Amigos

« ... No hay sol sin sombra y es necesario conocer la noche. ...» [El mito de Sísifo, A. Camus]. Empujando una piedra cuesta arriba de manera sempiterna y viendo cómo al finalizar el recorrido, la piedra resbala a su posición original, Sísifo contempla la absurdidad de su cometido, de su castigo. Y detrás de aquella colina, –su único aliciente–, hay una enorme extensión de «nada»; el absurdo habita y reina cotidianamente. Será preciso buscar una manera de liberarse. Es lo que indaga mi admirado Camus en ese libro que (re)leo muchas veces, antes de decir algo, porque siempre que lo hago, entiendo mejor y aprendo...

El espacio os corresponde a vosotros, simplemente os acompaño y, por ello, callado. Si supieran lo que vale un silencio, quizá sabrían que el hombre, tanto por sus comedias, como por sus sinceridades, se define o, mejor, se revela.

«...Dar lecciones de moral nunca ha sido una prueba de virtud; sin embargo, hay un mérito indiscutible en dar el paso desde la propia desdicha, o de la de quienes nos rodean, a la de los otros, sin reclamar para uno el estatuto exclusivo de antigua víctima.» [El mal del siglo. T. Todorov.]. Las palabras nos retratan y mi único propósito son los que están tras ellas; y ya, sin más juegos de palabras, ni comedias, ahogando renglones, con poca fuerza, sólo decir que: No, no será igual, aunque lo repitan una y mil veces, y, después de tanto tiempo, lo sigan creyendo...
eduardocarpio

PS Juan, Mariluz, Eduardo, enfrascado en la prosa, no se me ocurre forma poética alguna... Gracias, amigos, por vuestros comentarios, ayudan a subir los escalones y a sosegar también...

 

[FONT=Garamond][FONT=arial]

No sé si tú, Eduardo, o tú, Lluvia bonita, tenéis la costumbre de "suscribir el tema" (yo lo hago en todos los que publico y comento), para, así, tener aviso por Email de que tal o cual usuario "ha dejado un comentario, respuesta, etc".
Por tanto, quizás estas palabras queden sin ser conocidas. No obstante, necesito escribirlo, y que mejor que este espacio en el que Lluvia nos ha dejado el poema de Ana y su despedida.

No tenía ni idea de lo ocurrido hasta que leí el trío de ovillejos de Luís (dedicados a Ana, Arquitón, y Elhi). Mi comunicación con Arquitón ha sido inexistente, y con Elhi, muy poca, mas con Ana siempre la hubo, a través de comentarios y respuestas a nuestros respectivos poemas, y los saludos en los perfiles, y llegué a admirarla, ya quererla en la distancia, y sé que era correspondido en ese aprecio.

Ana, (si por algún medio llegaras a leer esto, esto te digo):cuanto siento que ya no estés en este Jardín de poesía, tu presencia era para mí como la presencia de una esplendorosa, radiante, y bella rosa, que destaca entre las flores. Tu poesía eleva el espíritu, y tu gentil alma, figura, y corazón, llenaban de luz y campanitas este Portal. El cisne de tu nick y de tu avatar evocaba la diáfana hermosura de tu interior y la belleza de tu semblante.
Ante tu partida, mi sentimiento me hace recordar unos versos de Becquer "cuando llora el alma sin que se humedezca la pupila", pues así me siento yo ahora mismo.
Elevaré mi copa en un brindis por tu felicidad, y alzaré un pensamiento a los dioses para que alfombren tus senderos con las luces de las estrellas con las que adornaron los firmamentos.

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A ti, Lluvia, quiero darte las gracias, por colocar lo escrito por Ana en tu comentario.

A ti, Eduardo, te envío mi reconocimiento y aprecio por el sentido y emotivo detalle que has tenido para con esta amiga tan entrañable, Ana.

Un fuerte abrazo, mi admirado poeta, y, ahora más aun, querido amigo.

Lluvia bonita..................Besos en alas de los vientos.

Ana, ohh¡, Ana preciosa........Hasta siempre, hermosa flor de primavera.[/font][/font]

 

Juan, Mariluz, Eduardo, LLUVIA, Ana, Elhi, Virtus

En estos momentos en los que la mirada solo se intuye en la distancia virtual, aquella que cercana me ayudaba a corregir la deriva viendo los peñascos, esta vez hacia ellos a toda vela y sin gobierno. Nada es igual y todo seguirá igual —tautología o perogrullada, ¡qué más da!—, pero acercándose la primavera, que confieso recibiré sin alegría, abundante de polen, siempre radiante, la siento desabrida. El tiempo —ahora dicen que va hacia atrás— me hará saber, pero el vecino, augur reputado, ya me aventuró que no espere sino una prolongación de lo sabido. En fin, agradezco vuestra presencia, pues en pleno invierno, duro, prolongado y desapacible, los huesos bien la sienten y, por lo tanto, el esqueleto se mantiene.
Lo mío al fin, ¡qué sino simpleza!, aunque otros crean que lo suyo, siendo de este mundo, es otra cosa. Ellos sabrán. Con mi afecto, un fuerte abrazo
eduardocarpio

 

Bella obra nos compartes; un placer pasar por tus letras. Felicidades.Mi abrazo con estrellas.

 

Dejo la modesta huella de mi paso, por esta maravillosa muestra de amistad, que ofreces a nuestra querida Ana.
Te envío, Eduardo, un abrazo sincero y aprovecho para recordarte la gran admiración que siento por tu persona.
Precioso poema, como no podía ser menos.
Un abrazo.