Y sin querer...

Y sin querer, termino hablando siempre de tí,
después de tres ginebras,
las que me hacen tragar mi orgullo,
con la tónica de que todos los días amanezca llorando.

Hoy no va a pasar,
hoy va a disfrutar de mi noche.

Sin querer, sigo pensando en tu pecho,
tus labios,
esa forma que tienes de tocarme ahí,
justo ahí,
donde tú sabes.

Y sin querer vuelves a aparecer
en otro orgasmo, y ya sabes,
siempre fui un desastre para mentir...

Y sin querer termino hablando otra ve de ti,
y siendo sincero,
ya se me pasó el efecto de los tres gintonic.

Te escribo, sin querer, otra noche
esperando contestación,
como si esperar fuera lo único que me quedase de ti...

Y sin querer.
Y sin querer.
Y sin querer, te quiero...

 

Original en su idea y buen desarrollo posterior, Me gustó. Un abrazo amigo poeta sin billete. Paco.

 

Profundo poema, a veces todo recae inconscientemente, grato leerle