Y ya no había mas de mi adorada melancolía

Prolongué mi sueño y ​

Tenía una caja, y en ella mis secretos estaban​

Tenía un labial, y en rojo en la pared decía “Dios es verbo”​

Tenía un aura tan mediocre, era de cartón​

… Con cartón invisible, imprescindible, ​

Roto y estúpida-mente feliz…​

Habría lluvia de estrellas y me puse el antifaz ​

Aaay cariño mío, contigo el rubor es natural​

Te hundí en mi pecado​

Y te bailé sin penas en mi cabeza ​

Y ya no había mas de mi adorada melancolía ​

Que al fin esa noche bordaba un antifaz ​

De honor eran tus brazos, de sed tus venas ​

Y a sal bendita sabían tus labios​

Tenía una caja, y en ella mis secretos estaban​

Descubriste el verbo en mis labios​

Tantas veces quise ser yo a rienda suelta​

Ven pronto amante sol, muestra la faz de nuestro amorío.​