¿Ya lo olvidaste,madre?

No digas eso,
a ese hombre lo quiero,
viviré a su lado.

¿Ya lo olvidaste madre?,
a ti también te advirtió la abuela,
pero tu seguiste con papá.

Sonríe al recordar,
una lágrima resbala por su cara,
evocando a su gran amor.

El que su vida llenó,
un mundo para ella construyó,
y ella tanto amó.

Ven aquí, mi bella rosa,
se fue la niña traviesa,
ahora soy una mujer enamorada.

Como tú,
elegí con quien compartir mi camino,
pero siempre estaré cerca de ti.

Magda Lluna

 

Amable Magdaluna.
Las añoranzas de gratos recuerdos y reencuentros con el "alma", traen sin querer la nostalgia, que desemboca en un suspiro o una làgrima, llegando enamorando soledaes con su dolor sutilìsimo pero profundo... para meditarlo en silencio., placer de leerte Afro-Toasa.

 

Muchas gracias por tu comentario,bst

 

Muy lindo poema,eso nos pasa casi a todas nosotras,nuestras madres quieren decidir por nosotras pero se le olvidan que ellas también tomaron su decisión,pero como quiera siempre viven en nuestro corazón,linda inspiración,

 

Gracias amiga,bst