Ya no caigo en tus trampas

Ya no caigo en tus trampas
Ya no soy una niña,
para creer en tus juegos.
La vida me ha herido bastante,
para que pretendas engañarme.
Mi pensamiento vuela…
presintiendo tus mentiras
tan ingenuas como tú
No caeré de nuevo,
en tus engaños,
mi corazón ,carne triturada
ya no sangra,
mi alma cubierta de telarañas,
enmarañada red de desdenes
ya no siente nada.
Mi piel suave terciopelo
aletargada en el silencio
no se conmueve.
Solo mi cerebro…
sigue movilizando
mis neuronas,
que están a la defensiva,
cada vez que tu voz ,aparece,
que tu piel roza…
mis recuerdos.
Quédate con tus desprecios,
que nada aliviara mi pena,
ni la tuya, cuando descubras
lo que valía...
y me dejaste partir.

 

Un paso adelante más allá de la pena.

Buenos versos, Luna.

¿Te gusta ese azul oscuro, profundo y silencioso que solo se revela en algunas noches? Bueno, te mando un abrazo de ese azul.

 

gracias César
un gusto tenerte por mis letras
yo te envio un abrazo cálido de luna roja

 

Siempre viendo hacia hoy, nunca dejarse manipular por un amor que
ya sabemos está condenado al fracaso antes de comenzar. Tu poema
triste es un acto de determinación, de caminar ya deslastrada de lo
que te atormenta y te hace sufrir y eso lo celebro!!! Besitos apretados
en tus mejillas.

 

gracias por leerme Anita
un abrazo cálido