Ya no confío

Hoy me siento anormalmente triste,
más de lo que suelo estar,
hoy confirme nuevamente
que en ti no puedo confiar.

Lamento que lo nuestro no funcione
creo que lo más prudente es terminar.

Mis ojos se inundan por tu ausencia,
de solo pensarte lejos me entristezco,
quiero tenerte siempre en mi presencia
pero se que ya no soy tu dueño,
que ya no pertenezco a tu existencia.​

Secaré mis lágrimas
y aun adolorido continuare con mis días
porque sé que esta agonía,
terminará, pronto, o tal vez algún día.​

Solo a ti te digo lo que pienso
mi intensión no es lastimarte,
has tu vida, aunque signifique
que yo en silencio tenga que llorarte.
​

Sigue haciendo lo que hacías,
total, en mí no pensabas.
Todas tus palabras eran fantasías,
fantasías perversas, que yo en mi ingenuidad creía.​

No puedo reprocharte, lo intento,
pero tal vez no fui buen amante,
y, aunque siempre buscas compararme,
solo he de decirte que jamás te lastime
al compararte con alguien que alguna vez ame.

Tus reproches no comprendo,
buscas cualquier pretexto para insultarme
pero por más cruel que intentas ser
tus dardos no consiguen alcanzarme.​

He descubierto que soy un cobarde
si, soy cobarde, por que no puedo enfrentarte,
no tengo el valor de decirte las cosas a la cara,
no soporto la idea de que con mi verso pueda lastimarte.​

No tolero tus mentiras,
me molesta tu hipocresía,
estoy cansado de todo
aunque te confieso,
que he de luchar porque no quiero perderte.​

Sé que él te enamoró hábilmente
que en su red caíste ilusa,
que el confabulo contra mi
esta escaramuza
pero victorioso he de salir
por que mi sangre hierve
de solo pensar que te pierde.

Quiero que sepas que soy tuyo
aunque tú no quieras
mi corazón te lo di,
y por más que intento
no soy capaz de tomarlo para mí.​

Lloro en silencio,
sufro por tu desamor y tu desprecio,
pero he de decirte
que te conquistare nuevamente
alguna forma encontrare de retenerte.​

No sé si aún me amas
yo quiero creer que si,
y la esperanza que tengo
es de soñarte, soñarte, nuevamente junto a mí. ​

Necesito tu presencia,
y aunque tu cuerpo me acompaña,
lo que pido es que estés presente,
con tu cuerpo y con tu mente.​

Todo lo que dices yo lo creo
por más descabellado que parezca
aunque sepa que me mientes,
yo... yo te creo.

De todo esto lo único que te pido
es que no me digas TE AMO si ya no lo sientes
tal vez si te conquisto nuevamente
lo digas de verdad
y yo recupere al fin la dicha,
la dicha de amarte, amarte con libertad.​

Esa libertad que da el confiar,
confiar, en quien se ama.
y yo aún te amo
pero necesito nuevamente confiar...
en ti, en tu amor
en lo nuestro...​

 

Hay amores que son nocivos y por lo que no merece la pena luchar. Una tremenda dualidad se refleja en este poema, por un lado la resistencia a la pérdida y por el otro, un contraste con la realidad. Tal vez consigas esa libertad, en esa batalla de los sentimientos enfrentados.

Muy sentido tu poema.

Un abrazo.

 

Divinas letras excelentes, una maravilla de creación soberbia, magnífica inspiración suprema.

 

CONFIA EN EL AMOR A PESAR QUE DUELE MUCHO... UN GUSTO LEER ESTE VERSO EXTENSO E INTENSO A LA VEZ

 

Divinidad excelente de obra maravillosa.

 

Gracias por sus comentarios, y Jorge, no creo merecer esos halagos.

 

Hermosas y desengañadas letras.
Un placer leerte