Ya no danza lo morena

Ya no danza la Morena

En el barrio del candombe
una morena bailaba,
sus caderas contoneaba
al ritmo de los tambores.

Era su cara risueña
con sus ojitos morenos,
el pelo con un pañuelo
y sus labios bien pintados.

No hubo mozo en el pueblo
que no mirara arrobado,
pero ella tenía solo
los ojos para su amado.

Daba gusto su bailar
al son de los tamborines,
el vaivén de sus caderas
su candor y sus mohines.

Una noche no se vio
a la morena danzando,
se fugó junto a su amor
nunca más la vi bailando.

Los tambores no sonaban
esperando su danzar,
dicen que su amor fue necio
solo se la ve llorar.

PD: Si eres victima de maltrato denuncia

 

Un amor intenso transformado en frustrado. Nos dejas hermosas imágenes muy descriptivas. Un placer dejar mis saludos.

 

tremendo poema has dejado sentir mi bella amiga Mary
que gusto y placer volver a leerte!!!
gracias es un bello poema reflexivo
besos abrazos y gusto de saberte cerca

 

Felicitaciones, bellos y originales versos de suave musicalidad, saludes, mis mejores deseos.

 

que bello, parece mentira es mas fácil inspirarse en un chica de color que en una rubia.
bello poema un gusto leerte.

 

Hermoso poema y lastima que la historia de amor no haya terminado bien. Encantada de leerte. Saludos.

 

Un bello poema de un amor malogrado por la necedad de su amante. La descripción que haces de la Morena y su baile me ha gustado mucho, expresiva y y certera en tus palabras. El maltrato es una lacra social de nuestro tiempo a la que todos deberiamos combatir dentro de nuestras posibilidades. Un abrazo Mary. Paco.

 

Mi estimado Joblan, agradezco tu visita y tus palabras .Hasta pronto

 

Alicia ,amiga me dio mucha alegría verte pasar por mis letras.Abrazo

 

Marco Antonio me alegra mucho el verte en mis letras.Gracias

 

Compañero Antorcha2015, la inspiración no tiene color ni raza, solamente escribes lo que en ese momento te inspira tu corazón

 

Querida Lourdes C siempre es grato para mi verte en mis letras.Bendiciones

 

Estimado Paco me siento honrada siempre que te veo en mi poesía