¡Yo pude amarte más!

¡Yo pude amarte más!


Yo pude amarte más, y sin embargo
dejé pasar el tiempo que tenía
No importa, fuese corto o fuese largo
el caso es que fui torpe… y te quería.

Yo pude amarte más, bastante más
si hubiese comprendido que los años
gusanos son que marcan su compás
y pueden, sin querer, hacernos daños.

Yo pude amarte más, ¡y tú lo sabes!
Jamás pudiste verme en la taberna
mas yo desperdicié los años claves
creyendo que la vida es cosa eterna.

Yo pude amarte más y sin embargo
viví con la embriaguez de mis tareas
quedándome en la boca un poso amargo,
un mal sabor de falsas melopeas.

Yo pude amarte más de haber medido
el dulce patrimonio de mi suerte:
que tú eras mi mujer yo, tu marido
y nuestro era el amor hasta la muerte.

Ahora nos quedamos, frente a frente,
algunas noches frías del invierno
llenando de silencio nuestra mente
que ocupan hijos, nuevas, hija, yerno…

Mas sé que muchas veces, tan callada
te veo meditar, mientras cenamos
que aprecio una sonrisa en tu mirada
en medio del silencio en que quedamos

Y es porque siempre piensas en tus hijos,
tus hijos y en tus nietos ¡ahí es nada!.
y en todos los problemas y entresijos
que puedan encontrar: ¡¡Si fueses hada!!

Te quiero compensar en cierto modo
los años que perdimos inconscientes
ahora que tenemos casi todo:
los hijos y unos nietos tan recientes…

No quiero se me pare el mecanismo
que tiene una misión potente y doble:
hacer que me mantenga siendo el mismo
y pueda yo quererte fuerte y noble.

Si llega ese momento, te prevengo
que soy aquel que siempre más te quiso
que pude equivocarme, pero tengo
tu amor como el tesoro más preciso.

Y en esta Nochebuena de conjuro
reunidos con los hijos, mis garantes,
te quiero reafirmar, mi amor más puro
diciendo que te quiero… ¡más que antes!

 

Es un poema sublime amigo poeta
sin duda gracias a su deliciosamente bien trabajada rima
que lo convierte en una maravillosa canción
plena de amor y fuerza.
Un abrazo, te dejo reputación.

 

Hermoso poema nos dejas con una gran reflexión. La vida no es eterna y las parejas deberían decirle lo mucho quese aman todos los días para que al final del camino no hayan arrepentimientos pero nadie es perfecto. Me encanto tu bello poema. Saludos.