Juguemos a morirnos

Voy a dejar de respirar veinte segundos
mientras recobras tú
las tibias ansiedades de tus muslos
y recupero yo el aliento
que se amoldó paciente hasta fundirse
en tus latidos.

Nos quedaremos quietos
el uno junto al otro
como dos aves recostadas
en el paréntesis nocturno,
par de olas exhaustas cansadas de huracanes.

Que me muera de ti,
¿qué te parece?
Morir de ti como morir de la risa de un árbol
o de una música que limpia
los pulmones y sacude la tierra
de los ojos.

Morir de ti como de lluvia y de promesas,
de ti morir como un espejo sin dolores,
morir como de flores en busca de florero.
Como de luz morir
o de un alegre infarto.

Aunque mirándolo bien,
mirándote bien el vientre adormecido
y las manos abiertas
y el corazón conmigo,
la vida ya comienza otra vez a gustarme.
¿Qué tal si cambiamos el juego
y a partir de esta noche
lo tomamos en serio?

Juguemos a vivirnos todo el día
todos los días
de mí hasta ti
y viceversa.

 

Vaya juego, muy relatado y haber si consigo alguien con quien jugarlo:::sonreir1:::

 

Muy buen poema, me ha gustado el setimiento y las imagens que manejas, la penultima estrofa me ha encantado, un placer pasar portus letras.

 

Bella composicion amigo poeta, sigue asi, espero leerte pronto un abrazo :::banana::::::banana:::

 

Muy bueno jabbier, te felicito.

 

¡Me encanto tu poetica!...estos versos tienen la inspiracion perfencta debujada con el elnguaje del amor..Un placer pasaear por tus versos.

 

Que bonito, que bonito, me ha parecido un precioso poema, saludos

 

Voy a dejar de respirar veinte segundos
mientras recobras tú
las tibias ansiedades de tus muslos
y recupero yo el aliento
que se amoldó paciente hasta fundirse
en tus latidos.

Nos quedaremos quietos
el uno junto al otro
como dos aves recostadas
en el paréntesis nocturno,
par de olas exhaustas cansadas de huracanes.

Que me muera de ti,
¿qué te parece?
Morir de ti como morir de la risa de un árbol
o de una música que limpia
los pulmones y sacude la tierra
de los ojos.

Morir de ti como de lluvia y de promesas,
de ti morir como un espejo sin dolores,
morir como de flores en busca de florero.
Como de luz morir
o de un alegre infarto.

Aunque mirándolo bien,
mirándote bien el vientre adormecido
y las manos abiertas
y el corazón conmigo,
la vida ya comienza otra vez a gustarme.
¿Qué tal si cambiamos el juego
y a partir de esta noche
lo tomamos en serio?

Juguemos a vivirnos todo el día
todos los días
de mí hasta ti
y viceversa.


Es una invitación a un precioso juego de resurrecciones cotidianas. Ninguna otra, mejor. Y tus versos... tus versos son una apuesta bella a la sobrevivencia del amor y la Poesía.


Un abrazo desde Buenos Aires, Jab.