ánima, estoy amándote

Tiemblo pero me siento valiente
tengo el cuerpo caliente pero mis manos frías
estoy prendada de un fantasma
quizá puedas entender lo que digo,
no hubo nadie nunca ni nada como él.
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Cuando llega el crepúsculo y cierro los ojos
puedo ver su sensual espectro rosa sobre mi pálida pared
viene hacia mí, acaricia mis salvajes, psicodélicos sueños
y cuando empezamos a charlar,
usa metáforas pues la primavera no es más una estación,
es simplemente alguien que llena su corazón de anhelo.

No veo ningún pelo de punta
ni de él ni mío
solo adolece mi rostro con lágrimas
que acierto en las mañanas cuando se secan en mi rostro.

¿Por qué no creer en él?
sé que debes estar pensando, esto extraño ¿verdad?
puedo creer en cualquier cosa
¡puedo!
¡puedo hacerlo otra vez!
cualquiera puede.

 

Siempre me encuentro envuelta sin querer en lo abstracto! pienso que es porque se necesita creer en algo. cualquiera que éste fuere tu excusa! gracias por tu comentario! saludos!