Mamá cabra y sus 7 cabritillos (Cuento clásico, rimado)

Vivía la mamá cabra
con sus siete cabritillos
alegres y juguetones,
como si fueran chiquillos.

Pero la cabra es cabal
y ha de salir al trabajo
así que deja a la prole,
gamberreando a destajo.

Antes de marcharse advierte
a sus queridos infantes:
¡No le abráis la puerta a nadie,
sin aseguraros antes!

Si viene el lobo y os llama,
con muy suave vocecita,
pedidle sin titubeos
que os enseñe la patita…

Pero el lobo, que es astuto
y que grandes trucos sabe
ya se ha empolvado las patas
antes de que el día acabe;

las tiene como de nieve,
refulgen de la blancura
y se ha tomado diez claras:
su voz rezuma dulzura…

-Abrid, abrid, pequeñines…-
susurra con voz melosa
y a las criaturas engaña
de una manera alevosa.

¡Ñam, ñam! se los va comiendo,
pero ve que falta uno
¿a dónde se habrá metido
este cabrito importuno?

Es igual, tengo bastante,
mejor voy a hacer la siesta.
Después de tal atracón,
la tripa ya me molesta.

Cuando vuelve mamá cabra
encuentra el desaguisado
y a su cabrito pequeño
en el armario encerrado.

Entre mocos y lloreras
le explica lo sucedido;
mamá cabra está furiosa:
¡Yo me cargo a ese bandido!

Enarbolando la aguja,
con gran determinación,
va en busca del depravado
para castigar su acción.

Se lo encuentra junto al rio,
panza arriba, bien dormido
y le arrea un tijeretazo,
porque está desprevenido…

Con las prisas los cabritos
estaban sin masticar
y van saliendo enteritos,
con intención de escapar.

La cabra, que es enfermera,
le practica una sutura
y deja al lobo bordado,
con una buena hilatura.

Marchan raudos y felices
de vuelta a su dulce hogar
con la lección aprendida:
¡Siempre hay que desconfiar!






​

 

¿Te hago el caballito?
Gracias por venir y por darme ánimos continuamente.
Besazos.

 

Me encanta porque la señora no fue nada vengativa y no le llenó de piedras la barriga ni lo tiró al río. Le hizo una sutura toda elegante. Algo de crueldad le has quitado al original, no está nada mal.

Del susto el lobo decide
volverse vegetariano,
con un bordado le basta
en ese cuerpo serrano.

Me has hecho recordar que tengo una versión de otro clásico por algún lado.
Un abrazo.

 

Ya se están perdiendo
esos cuentos de almohada
y ya que bien lo has contado
feliz me voy a la cama
que aunque no escuchó tu voz
a sido como una nana...

 

Precioso Eratalia. Me encantó. Y es magnífica la moraleja. Un saludo.

 

Estoy viendo a los cabritos salir empapados con la clara del huevo, y la cabra los va lamiendo limpiándolos de regreso a casa raudos y felices.
Felicidades, te ha quedado encantador, simpático, entrañable, lleno de bondad.
En cuanto a la cadencia, nada nuevo bajo el sol, otra bella canción tuya que se escucha con naturalidad y da pena que se acabe.
A mi sobrina le va a encantar, gracias.
Un abrazo
Javier

 

Me encantó leer tu poema y me acordé que ese cuento con esa historia lo leí de pequeña pero si no me equivoco era con borregos. Recuerdo que me gustaba tanto el cuento que lo leía y los volvía a leer y ese libro no cada vez quería engañar a los borreguitos para que le abrieran la puerta hasta que lo consIguio ostra do su pata llena de harina. Lo bueno es que llego la mama a rescatar a sus hijos. Gracias por hacerme recordar ese cuento que tanto me gustaba de pequeña.

 

Tu poema se merece una gran ovación
pero debo decir que estos cuentos
siempre me produjeron gran desazón.
Bambi fue sin duda mi gran frustración

Te dejo un abrazo grande y rimas aparte que no tengo ni idea jajajaja


Palmira

 

Yo también tengo una versión de Caperucita moderna, de las que chatean por internet.
Venga, sube el tuyo, que estoy deseando leerlo.
Besos.

 

A rorrooooo a dormirrrrr
¿O sea que te ha parecido un peñazo y te ha dado sueño?
Bueno, te lo agradezco también.
Abrazos.

 

¡¡Fantásticos y geniales estos versos hechos cuento!!Se leen con avidez para llegar al maravilloso desenlace. Me ha encantado el final feliz con su mamá capaz de recuperarlos evitando la frustración.APLAUSOS
Un placer leerte Eratalia
Saludos

 

A veces no es bueno inculcar demasiada desconfianza en los pequeños, pero en su justa dosis es necesaria.
gracias por dejarme tus palabras.
Saludos cordiales.

 

No te dé pena de que se acabe, que tengo un repertorio para hartar.
A tu sobrina le gustará más o menos dependiendo de la edad que tenga.
Gracias por respaldar mis escritos.
Es un placer tenerte aquí.
Besos.

 

Cómo no voy a respaldar tus escritos si es un placer leerte, con esa inventiva, humor, intensidad, musicalidad... ya te digo.
Seguiré viajando por tus escritos, y si no no te ofrezco respuesta, es que me cuesta mucho escribir.
Mi sobrina cumple este mes 9 años, ¿cómo lo ves?, yo en estos temas soy un desastre con buena intención.
Gracias por todo.
Besos

 

No te enrolles...
!y cuentame otro!
que por las no me ne desvelo.
Se lo leeré a mi Madre que seguro le gusta,
Lo de cabrita enfermera
quedó bordado...

 

Pues en España siempre ha sido el cuento de " Los 7 cabritillos y el lobo", claro que yo lo he edulcorado y he hecho versión light, sin asesinatos ni muertes violentas.
Gracias por pasar a leer.
Un abrazo.

 

Es cierto, todos son a cual más horrible. La Blancanieves que le quieren sacar el corazón, la Caperucita devorada por el lobo, la Cenicienta maltratada física y psicológicamente... Crueldad a tope.
Gracias por venir a leer mi versión.
Abrazos.

 

Muchas gracias Valen, es un placer recibir tu visita y tus gratos comentarios.
Abrazos.

 

A los nueve años le puede parecer que ya es mayor para cuentos, o le puede ver la gracia por el hecho de rimar. Depende. No sé si ya estará en quinto. De todos modos seguro que hay palabras que no entiende: sutura, hilatura, alevoso, enarbolar, desaguisado... todo eso no forma parte del vocabulario de un niño de esa edad, salvo rarísimas excepciones.
De nada, por nada.
Abrazos.

 

Vale, en breve mi versión de Caperucita, la moderna.
Gracias por pasar.
Abrazos.

 

¿Te lo contaban de pequeño? Me alegro que te recuerde un pasado feliz.
Gracias por venir.
Saludos cordiales.

 

Hermosa la forma melodiosa de contar este cuento colmado de significado...
Un gusto leerte querida amiga...te abrazo con todo mi cariño...
Nancy

 

Hola, Darkness, quedó tu amable comentario sin respuesta, lo siento.
Te lo agradezco ahora, con todo cariño.
Un beso.

 

Y pensar que este cuento lo he estado leyendo yo veces y veces sin versar...
Si me los publicases en formato de papel que bien me vendría. No me puedo aprender esto de memoria, no me da la cabeza.
Ya aprendí bien la lección, nada de comer corderitos que su mamá tiene mala leche.

Abrazos, Oncina.

 

Me he acordado de mis cabritillos al ver a tu lobo feroz, y vengo a verlos y encuentro precisamente, un mensaje tuyo sin responder. Mira, justo hace un año. La de cosas que tendré por ahí sin haberlas agradecido, es lo que tiene irse.
Gracias por tu fidelidad.

 

Bellísimo poema , una historia llena de ternura y valores .
Excelente moraleja.
Un placer .
Saludos.

 

Muchas gracias, amable Alecc, por seguir mis poemas.
Un saludo muy cordial.