La termita

A la termita famélica
que horada mi mobiliario
sigo y persigo a diario
con un ansia maquiavélica.

Porque veo que mi mamá
anda ya desesperada
del spray siempre cargada
y sé que no parará.

Parece que escucho dentro
de esta pata su ruidito
¡ya sé lo que necesito!
lo buscaré en un momento.

Este serrucho gigante
le he cogido a mi papá
sierro con gana y ya está
la pillaré en un instante.

Pero el insecto se oculta
mientras que sierra las patas;
con sus ideas insensatas
un buen destrozo resulta.

Su mamá pronto regresa
y encuentra el desaguisado
el sillón ha destrozado
y las patas de la mesa.

Ella queda boquiabierta
del soponcio que ha pillado...
y la termita ha escapado
tan tranquila, por la puerta.​

 

A estas me parece que las va a contratar Ikea... A las dos, a la termita y a ella, jajaja. Muy ocurrente.
Un abrazo niña Eratalia.

 

Que yo sepa las termitas son carroñeras,
viles insectos sin pradera que hacen del hogar del hombre su madriguera,
no es una cuestión de serruchos es una cuestión de poner un cartucho de dinamita
y mandar a las termitas hacer sus aposentos en otra ermita...es una broma...querida amiga,
Ángel​

 

Ingeniosa con esta maravillosos coplas a la termita
Gustoso dejo mi huella con fuerte abrazo, eratalia.

 

Gracias, Luz.
Esto es una maratón de infantilandia.
Un placer encontrarte aquí.
Besos.

 

Pues lo del cartucho de dinamita igual funciona, porque lo demás... En mi casa, no hace mucho, por las termitas se vino abajo el mueble donde estaba apoyada la televisión, con catastróficas consecuencias. No es verso, pero es verdad.... y sin serrucho.
Me he divertido leyéndolo, gracias.
Javier

 

Chispeantes versos que impregnan de aquella dificultosa misión de hallar al bichito jeje...
Muy grato leerte querida amiga...te abrazo con todo mi cariño...
Nancy

 

¡Excelente! Hermosisimo poema lleno de exquisito humor y relatando travesuras que "algunos" supimos hacer de niños. Un placer pasar por su maravillosa poesía, reciba mi más cordial saludo.

 

Muchas gracias por su visita, Don Ángel y por su jocoso comentario.
Saludos.

 

Gracias, Don Ramiro, es usted todo amabilidad.
Saludos cordiales.

 

Para reír, nosotros. Para llorar, los padres. Para felicitar a su autora por sacarnos una sonrisa. Gracias.
Simpático e ingenioso poema.
Saludos.

 

¡¡Son indestructibles Eratalia!!No resultó una buena idea lo del serrucho, pero lo intentó, la criatura tiene iniciativa.Resulta divertido para quien lo lee, no tanto para los papás.
Saludos

 

¡UUUUh, menuda cosa! ¡Qué susto os daríais!
Espero que se hayan ido después por la puerta, sin arrasarla también.
Abrazos.

 

Gracias Dark por venir a leer mi historieta.
Un beso.

 

O sea que sierra en mano le cortaste una pata a la silla??? No me lo puedo creer!
Bueno, pues muchas gracias por pasar a leer mi poemilla.
Un cordial saludo.

 

Para agradecer, yo.
Para simpático, tú.
Para saludar:
Saludos cordiales.

 

Ya me lo imagino, jajá.
Muchas gracias por venir a leerlo.
Un beso.

 

Muchas gracias por tal comentario, eres muy amable.
Saludos cordiales.

 

Muchas gracias por acercarte hasta aquí. Te mando un abrazote.

 

Qué bello tema. Te imagino con el serrucho en mano más peligrosa que la termita. Un abrazote mi bella Eratalia.

 

Vaya destrozo.
Casi hubiera sido mejor, dejar tranquila a la termita.
Un abrazo, amiga Eratalia

 

Qué peligroooo, yo con un serrucho!
Gracias por venir, amable Paolo.
Un abrazo.

 

¡Ay, qué gracia! ¿Recomendais leer mi poema a la termita? Jajaja... Pues nada, muchísimas gracias por la mención.
Me quedo patidifusa.

 

Dicen, con razón, que no hay enemigo pequeño. Tu poema lo demuestra con gracia.

Feliz primavera.

 

Pues sí, aún no salgo de mi asombro.
Gracias por venir.
Abrazos.

 

Simpático e ingenioso poema nos compartes.
Esa termita escucho el ruido del serrucho y
se escapó veloz. Encantada de leerte. Saludos.

 

Muchas gracias. Lourdes, tú siempre tan amable.
Un beso.