Calaverita de azúcar

Calaverita de azúcar,
calavera de alfeñique,
calaverita de Izúcar...
amor a quien te dedique.

Los amigos que murieron
vinieron a visitarme.
No para siempre durmieron:
estuvieron para hablarme.

Calaverita de azúcar,
calavera de alfeñique,
calaverita de Izúcar...
amor a quien te dedique.

Yo coloco sus retratos
en la ofrenda de color.
Lágrima furtiva a ratos
se me escapa con dolor.

Calaverita de azúcar,
calavera de alfeñique,
calaverita de Izúcar...
amor a quien te dedique.

Para ellos rica comida,
pan de muerto, sal y velas,
papel picado y bebida,
y un camino de candelas.

Calaverita de azúcar,
calavera de alfeñique,
calaverita de Izúcar...
amor a quien te dedique.

Ya se terminó la noche;
volverán el próximo año.
Se fueron ya sin reproche
pero yo ya los extraño.

Calaverita de azúcar,
calavera de alfeñique,
calaverita de Izúcar...
amor a quien te dedique.

Izúcar de Matamoros: ciudad del Estado de Puebla donde se elaboran hermosas catrinas (esqueletos vestidos como damas) de cerámica. En México se producen muchos dulces de alfeñique, técnica que nos legó España, nuestra madre patria.​

 

Me deja el olor del zempaxúchitl, del atole y camote asado, del pan de muerto y, claro, de esa bella y dulce osamenta de azúcar. Gracias por la belleza compartida, amiga María Rentería.

 

Exquisitas redondillas las que se plasman en su maravilloso poema, sutiles, macabras, profundas y alegres. Un placer disfrutar de su bella poesía, María Rentería, reciba mi más cordial felicitación y saludo.

 

No me gustan las calaveras pues me dan miedo pero de azúcar ya es otro cuento jejeje allí sí no dejo una. Me encantó tu poema. Huele a dulce sentir y a dulce comer. Un abracito tierno, María y lindo día para ti.

 

Hola Rosa, pues sí, las calaveras y la muerte puede ser algo que asuste, pero en México recordamos a nuestros difuntos con cariño con esos dulces, jijiji... muchas gracias por pasar y comentarme. Besos, muchos...

 

Muchas gracias, Daniel, también para mí es un placer recibir este amable comentario de tu parte. Gracias por dejar tu huella en mi poema. Besos, muchos...

 

Ooooh, sí... y chocolate de mesa recién hechecito... gracias por la amable visita y el bello comentario... saludos cariñosos.

 

Una canción que dulcemente cautiva querida amiga...y como soy una golosa jeejje...
Un gusto leerte...te abrazo con todo mi cariño...
Nancy

 

Gracias, Nancy querida, yo también, jijiji, y las calaveritas de azúcar son ricas porque tienen un toque acidito de limón. Tu visita y comentario dan aún más color a mis ya coloridas calaveritas, amiga mía. Muchísimas gracias, te dejo mi cariño. Besos, muchos.

 

Muy hermoso, más en nuestras festividades.
Saludos cordiales.

 

Compañera Renteria me ha gustado mucho tu original poesía

 

Un placer de lectura este poema que con versos y rimas muy bien logradas celebra una antigua tradición de nuestro país: Mi saludo cordial.