Refugio.

Y era cuando la misericordia y las víboras remeras

y los suelos fregados que descansan al fondo de la caracola,


y era cuando no salir del barro

cuando los marrones selváticos y los cañaverales santos



cuando los salmones por los alveolos de la frontera

y esa noche de doce muros….


La ciudad hablando con doce vientos

los cimientos de mariposas de papel

las escaleras de las jirafas

y el faro sobre el olivar el sueño que otea la calavera…


dispuestos los mantos y los rebaños cantores

las lloviznas de signos

los truenos románticos


aquellos barcos sobre trillones de aseo

y nuestro refugio de cartón sobre las nubes.

 

Me ha gustado la incertidumbre de lo categórico y un espacio muy propio presentado como antítesis. Bella poesía surrealista. Saludos

 

Muchas gracias amigo Jose Luis por tu compañía y palabras para estos versos. Un placer saludarte con el deseo de que tengas estupendos días!

 

Me gusto mucho tu obra querido amigo Tribu. Que siga la inspiración. Un gran abrazo.

 

Muchas gracias querida amiga Laly, siempre es una gran alegría tu compañía. Un abrazo y el deseo de que tengas estupendos días.