Hoy es olvido

Hoy es olvido. El vino y el odio,
parapeto evanescente de certezas.
La lectura otorga un instante,
guillotina el pensamiento.
Corte, conexiones, Desenfoque.
Hoy es olvido: miopía, astigmatismo,
cataratas y displasia.
Firman la certeza los oftalmólogos,
y diagnostican un contexto.
El licor de las pausas. Las uvas de los placeres.
Regidos ahora en lo abrupto de esa sensación de mareo.
El giro es estela de colores, estela de frases.
Los nombres son colecciones.
El único recuerdo intenso
es del abrir de ojos quedo del cosmos.
El vómito incontenible derramado en única explosión
devenida de la óptica,
de la panacea,
el estanque del disparo.
En el embudo nada permanece.
Es imposible el examen.
La discusión está fuera de foco.
Todo referente está en la noria
como el cuerpo que salta de cubierta en cubierta.
Las cárceles están organizando el panóptico.
Cada quien en su cuarto con las puertas bien cerradas.
No ingresa una línea de sol para marcar un nuevo día
en la pared de la conciencia.

José Luis Galarza (2019)