Todos los santos pueden venir por mí

Muchachita, el Cielo es de los bien portados
y tu lengua el sol para los desalentados,
cada estrella una canción de amores trotamundos
y el moreno de tu pecho, el pan para los moribundos.

¡Tatica Dios, qué quieres conmigo!, justo hoy
que tengo seguridad de que ni guapo estoy,
ando con el alma floja por un beso
y con los pies desechos sin amor, como un preso.

Quedamos tablas a las tres de la mañana,
con el sudor a cuentagotas, sin mente sana,
cuando los cuerpos se confunden en la habitación
y sobran dos gemidos en el buzón del corazón.

Mi árbol de gigantes se secó,
sin dar un solo fruto me dejó,
anduve solo tanto tiempo sin un por qué
y el día de mi entierro, dije fuerte “me fallé”.

All the saints can come for me,
quedamos en dar un beso y te perdí,
no tuve amuleto más que el negro de tus ojos
y la alfombra de tu piel que dejó a mis dos pies, cojos.

Not even purgatory is good for me
y el moribundo he sido yo por esperar por ti,
cada noche cuando estreno la pasión
tengo un desaliento al no sentirte, corazón.

 

Uriel:
Tus poemas siempre se deben de leer conteniendo el aliento por que son muy sensibles,
el romanticismo a flor de piel.

Saludos

Blason

 

Muchas gracias por tu linda visita. Saludos. Un placer recibirte por acá.

 

El amor es la mayor verdad. Saludos. Un placer recibirte por acá.