A Sara

Iba Sara quemando distancias
rehuyendo al sol con su mirada
con hermosa sonrisa en los labios
con un ramo de rosas rosadas.

Era Sara, que siempre caminaba
por veredas de amargo existir
pero entonces llegó de la nada
un amor que ha empezado a fluir.

Guarda Sara, olvidadas sonrisas
y ahogados suspiros y ensueños
de los tiempos de cuando era niña
de momentos felices, risueños.

Lleva Sara, un recuerdo muy lindo
un recuerdo de amor lleva Sara.
un amor que surgió cuando niña
y en su pecho en silencio guardara.

Bertoldo Herrera Gitterman
Nueva Imperial, 25 03 24

 

Bellos tiempos, los que convivió Sara... los que desafortunadamente
}nunca volverán. Me gustó su propuesta poética.
Cordialmente:

 

Muchas gracias por la visita y el comentario.
Es una historia con bastante de realidad. Un homenaje a una persona que guardó su amor en silencio y que la persona que lo inspiró, se enteró muchísimo tiempo después.

 

"Nunca dejo que se apague tu luz porque
en ello, ciertamente me va la vida... que
no hay cosa más apreciada y con mayor
virtud / que la inspiración que siempre
.llega de tu mano... Poesía"
.Iván Terranova Cruz
Derechos reservados
Muy bien elegido este trozo, como presentación.
Un saludo desde Nueva Imperial, Chile.

 

Así, es la verdadera vida compañero, pero (hablando verdades) uno, siempre
tiene que seguir hacia adelante.

 

Muy cierto.
Hay "algo superior" que rige nuestros destinos, que otorga, permite, aparte, selecciona, direcciona. Y somos nosotros los que tomamos o dejamos todas las otras opciones que se van quedando al margen de nuestro camino.

 

Mis fraternos saludos, con todo el respeto que se merece; y, a seguir
haciendo lo que nos gusta, y... lo que nos gusta es; justamente la poesía.
Sinceramente:

 

Gracias, de nuevo.

 

Cuando yo nací, el lugar rural llamado Quilimanzano, estaba lleno de niños y jóvenes. De a 10 ó 12 por familia.
Pero cuando crecí, se contaban con los dedos de la mano. No había 10 muchachas en un círculo de cinco kilómetros de radio desde mi casa.
Curiosamente, tres de ellas se llamaban SARA.
Pero la Sara que inspira este poema, era demasiado pequeñita, sólo entra en el conteo, para graficar el tremendo despoblamiento que se generó en 18 años.
(Porque a los 17, yo era niño que no había terminado de crecer)