Acto II (Introducción)

Acto II (Introducción)

Llega ella abrigada con un
cielo de fuego y sólo la veo
cruzando abismos.​

Quedan las rodillas destrozadas de
tanta plegaria enjuiciando miedos para
eximirme de este castigo de sed.

Las siluetas quedan desvencijadas
a la espalda de la noche que intenta
callada bordearme en esta fe sin dios,
en este santo sin nombre;​

trato de mirarla, es bella,
pálida y ya su sed se sacia en
el vértigo de nuestra ausencia;

suele decirme: has que tu centro
de gravedad falle y
……c
………..a
……..………e
exigua de miradas.

Ella me presta su cielo de fuego y yo me segmento
tratando de usurparme en el silencio, mientras el eco
hace combustión de santidad.​

Su nombre ya no es nombre en esta tempestad
hecha frío, buscaba quemarse en la
hoguera de sus pies, amamantando
sueños de la nada;​

llegaba con su cara de angustia viajando
hacia los confines de la ausencia, derrame amniótico de su nacimiento vencido; ​

Y heme aquí hecha virgen esperando
un atajo nupcial en cada una de mis
oberturas…​

​

 

A veces se espera creer, a veces se suele beber y algunas tantas es contradictorio pensar que la espera traerá algo consigo.
Gracias por llegar a leerme, un abrazo.

 

Siempre agradecida contigo por llegar bella Lorena, un abrazo.

 

Mi bello K siempre un gusto verte por acá, gracias, un abrazote.

 

Un honor verlo Chepeleón, muchas gracias por tomarse el tiempo de comentar, un abrazo de vuelta.

 

Gracias Eugenio, siempre encantada de contar con tu presencia.
Besos.

 

Gracias siempre por detenerte en mí, creo que me conoces ya aunque mi voz sea este expresar interno.
Gracias muchas de verdad que si Vivi, besotes.

 

Muchas veces la espera impacienta.
Gracias por llegar a este rincón mi estimado Guerrero.
Un abrazo.

 

Agradecida por su comentario Child, un saludo de vuelta.

 

Agradecida en el alma por tu presencia Jesse, besos desde aquí.