Que absurdos que fueron los besos que no nos dimos, que imaginamos. Y como de a poco se fue perdiendo la vaga ilusión de tu mano en mi mano. Que...
Caen. Caen lentamente los hombres. Mueren. Mueren sin razón los poemas más bellos. Vuelan. Vuelan sin tener alas los pensamientos eternos....
Llueven lágrimas de sangre, como mintiendo, como rogándome. Profunda es la llaga de miseria, palpitándome Escombros y llantos diabólicos se...
Denuevo tú, yo, las sábanas, sublime roce de tus besos, mi piel esparcida en el suelo y entre los cojines, mis huesos. Desde el vacío profundo se...