El blog de Abrahám Emilio (Todos los derechos reservados)

Huele a esencia de joven.

El perfume exhala, llueve
y huele;
obsequio y penitencia,
esencia,
célibes, auras innoven
de joven;
calmados ahora troven
sus efebos años que
cantan, se impregnan y me:
huele a esencia de joven.

El hombre que vendió el mundo.

Anónimo sin pronombre,
el hombre;
malvado que lo negó,
vendió
por monedas, el inmundo,
el mundo...
y no dudó un segundo
en traicionar al maestro,
es el terrible siniestro:
el hombre que vendió al mundo.

¿En dónde dormiste anoche?

Ella ¿en qué sitio se esconde?
y ¿dónde?,
madrugada que te fuiste,
dormiste,
en soledad fui fantoche,
anoche.
Lloré y pensé anteanoche
y también hoy y ciertos días
e indago con melancolías:
¿en dónde dormiste anoche?

Por algo en ese camino.

Domo la vida y cabalgo
por algo,
curvas en paz, no cese
en ese,
el cáliz de un negro vino,
camino.
La vida no es paulatino
pone riesgos apropósito,
sin más somos el expósito:
por algo en ese camino.

Latido en forma de caja.

Mi corazón ha vivido
latido,
el amor y toda norma,
en forma;
y la presión sube y baja,
de caja;
La bendición y mortaja,
hecho y pintado en cartón,
un cofre es el corazón:
latido en forma de caja.

No puedes comprar mi amor.

Te pido que no te quedes,
no puedes
con dinero apreciar,
comprar,
y no va para el postor,
mi amor.
No salgo del estupor,
aquí no vale el dinero
y te soy lo más sincero:
no puedes comprar mi amor.

Vamos a estar muy juntos.

Y por donde caminamos,
y vamos;
el lugar a recordar,
a estar,
y aún vivos o disyuntos,
muy juntos.
Amistades y los presuntos
amores en el futuro,
pero si estoy seguro:
vamos a estar muy juntos.

Y tanto la amo a ella.

Amar con este quebranto,
y tanto,
por ella cambio mi tramo,
y la amo,
mi voz, mi calma y querella,
a ella.
Plétora de amor destella,
el corazón se enrojece
aunque no se lo merece:
y tanto la amo a ella.

Déjame vivir en paz.

De la hostilidad aléjame,
y déjame
en mi quietud, discurrir,
vivir
la transparencia veraz,
en paz...
las calumnias del rapaz,
disturbios y traición;
imploro con convicción:
déjame vivir en paz.

La ayuda de mis amigos.

La nobleza se reanuda,
la ayuda,
café amargo y dulce anís,
de mis
apartados enemigos,
amigos.
Mis júbilos son testigos
de la factible hermandad,
necesitaré en verdad:
la ayuda de mis amigos.

Yo quiero darte la mano.

Por solo abrazarte muero,
yo quiero
con el tacto acariciarte,
y darte
mi sentir, lo más humano,
la mano...
Puede ser tarde o temprano
para ofrecer mi amistad,
en la calma o tempestad:
yo quiero darte la mano.

Enciende y quema mi fuego

Con un cerillo y gas prende,
enciende;
llama que todo lo requema
y quema;
apaga el sentir, lo ruego,
mi fuego.
Adórame y desde luego
víveme con quemazón,
con candelas de pasión
¡enciende y quema mi fuego!

Ámame dos veces

te digo: bésame y llámame,
pues ámame,
por siempre te soñaré,
más de
tu vida, tu paz y sandeces,
dos veces...
Con los años envejeces,
para este amor no hay edad,
y te imploro con piedad:
¡ámame más de dos veces!

Barco hecho en cristal

Por los mares, yo me embarco,
el barco;
los ríos me dicen: ven...
y hecho en
escarchas de agua y sal,
cristal.
Llego a mi tierra natal,
remando la embarcación,
está en la imaginación:
el barco hecho en cristal.

Las personas son extrañas

Tienen bastantes neuronas,
personas;
buscan llamar la atención,
y son
gentiles y de cizañas,
extrañas.
Tiernos y de viles mañas,
se burlan del indefenso;
no todos, pero yo pienso:
las personas son extrañas.

Cuando la música se acabe

la canción estoy escuchando,
y cuando
en fiestas bailé,
¡música!... se
goza y en la razón no cabe,
acabe...
letra, ritmo y son se sabe,
el compás lo recordé
ese cual baile y me iré
cuando la música se acabe.

Y brinca al siguiente lado

Sal del pecado mortal,
y brinca al
cielo, y la armonía siente,
siguiente,
ya no seas un malvado,
el lado...
que Dios ya lo ha preparado,
quiere tu arrepentimiento,
obedece y haz el intento:
y brinca al siguiente lado.

Quiero y deseo ser libre.

Por la libertad gemí,
yo quiero y
por la paz sermoneo,
deseo,
para que el sosiego vibre,
¡ser libre!.
Pistolas de gran calibre,
acuerdos del plebiscito,
y con mucha fuerza grito:
¡¡quiero y deseo ser libre!!

La rapsodia del bohemio.

El poema no es parodia,
rapsodia;
el canto escrito en papel,
y del
que liba siendo abstemio,
¡bohemio!.
La égogla en el agremio
cantan a pasión doliente
y en el corazón se siente:
¡la rapsodia del bohemio!

Cosita loca de amor.

Una cosa pequeñita,
cosita;
sensualidad que provoca
y loca;
el nerviosismo es mayor,
de amor.
La paz nos canta mejor
en la pobreza o fortuna,
pues enamorarse es una
¡cosita loca de amor!

Eres mi mejor amigo.

Y entre todos los seres,
tú eres
mi compañero y mentor,
mejor
apoyo y el mejor abrigo,
amigo.
Con mucha pena lo digo,
porque a ti mal te juzgué
y recién entendí que:
eres mi mejor amigo.

No me detengas ahora.

Si me preguntas ¡no sé!,
no me
importas de donde vengas,
detengas;
mi persona no te adora,
ahora.
Uno siempre se demora
en olvidar tal primor,
yo te pido por favor:
¡¡no me detengas ahora!!

Viviendo conmigo mismo.

Soledad estoy muriendo,
viviendo
dolor, apartado amigo,
conmigo;
resignarse al conformismo,
¡lo mismo!
Por siempre ese espejismo,
podar las heridas hoy,
por ser narcisista estoy:
¡viviendo conmigo mismo!

Lo que nunca vuelve

Los dichos que descalabras,
palabras;
se van en tus pasatiempos,
los tiempos;
y juramentan tus pactos,
los actos...
Pasan en ratos exactos
acontecen sin pensar
no se pueden enmendar:
palabras, tiempos y actos.

La crueldad del destino

Odio, maltrato y maldad,
crueldad;
únicas normas que di,
de mi
detonante y cruel camino,
destino...
sucedió tan repentino,
lo malévolo a llorar
y el castigo soportar:
la crueldad de mi destino.

Flore rojas a mi amada

De fraganciosos olores,
las flores;
rosales de verdes hojas,
y rojas;
una chica enamorada:
mi amada...
para la mujer mimada,
por ella soy como soy
para alegrarla le doy
flores rojas a mi amada.

Bellos recuerdos de ayer

Juventud son solo sellos
y bellos,
éramos locos o cuerdos,
recuerdos,
pudimos más aprender
de ayer...
hermoso fue conocer,
grandiosa fue la niñez,
se recuerda en la adultez:
bellos recuerdos de ayer.

Los tiernos niños

Los niños ¿qué van a hacer?
correr;
¿y después de discutir?
reír;
¿y qué harán sin descansar?
jugar...
inocencia a alegrar,
dulzura del corazón,
¡¡qué niños¡!, sus ansias son:
correr, reír y jugar

Mascotas

Felinos de garabatos,
los gatos;
Están ladrando en los cerros,
los perros;
y son de ojos bermejos,
conejos.
Aunque esté cerca o muy lejos
extraño a mis animales,
"que curan penas y males":
gatos, perros y conejos.

Amores y odios

¿Qué sienten los hombres necios?
¡desprecios!.
¿Son frívolos episodios?
¡los odios!
¿Es opuesto a los amores?
¡Rencores!.
Habrán cariños mejores
bellísimos sentimientos
que se van de mis cimientos:
¡Desprecios!, ¡odios!, ¡rencores!

Los grandes poetas

¿Es un gran poeta añejo?
¡Vallejo!...
es un poeta sin duda,
¡Neruda!...
su inspiración nunca cesa
eh.. Buesa.
Genios de habla no inglesa,
reyes de los poemarios,
célebres y milenarios:
Vallejo, Neruda y Buesa.

Soy el celeste cuarzo de lagunas
que en los llantos nocturnos se resbala
por donde el miedo desespera y mata
en contraste negro de aquella luna...

Desde el lejano monte, frías punas,
es el viento transparente que llama,
las madreselvas y ecos que aranan
el amanecer gris de las locuras...

Soy la ceremonia de hielo y nieve,
aún cuando las claras aguas hierven:
soy la humillación que nunca descansa...

siempre se enroncha la escamosa piel,
secándose como gotas de miel,
¡soy melodía de amor y esperanza!

Tumultos que extorsionan
al descanso eterno...
semejante al infierno
que la vida nos castiga...

nos mira a los ojos y bajamos
el rostro, mirando los zapatos,
pensando en lo mundano
y será cuando muramos...

El escozor en medio de la metamorfosis
se incauta del ajeno corazón,
machacando con su hipnosis
trivialmente la compasión...

ni entrado en años ni doncel,
el erguido y fuerte, es por ello talud,
se relaja en flores de abedul
que caen como hojas de papel...

ni el adonis, ni la hermosura
merecen tal castigo,
opuesto al japones "kigo"
del "haiku" que embellecen su tesitura ...
odio y amor... ¡copartícipe!,
que copa nuestro andar
y la vida como premio se ha de llevar,
llevándose la vida y melanina ¡partícipe!...

En la cabeza está esa presión
por falta de amor... ¡¡sufrimiento!!,
el alma dolida y en fermento,
culpable es... ¡¡el dolor de corazón!!

Siempre borracho a balbucear,
campante de su beodez,
licor, ron y jerez..
¡el vicio de fumar y tomar!

negligentes pasos en zig-zag,
destilando olores de licor y nicotina,
después de "la mona" a la cantina,
catando la bebida voraz...

Siempre ebrio y neurótico,
en compañía de los bohemios,
son de la calaña y del gremio
de los peculiares alcohólicos.

Siempre pidiendo más licor,
desplomándose en los charcos,
mareados sentándose en los bancos,
envenenando ¡el vicio del dolor!

Siempre el borracho llora y llora,
"lágrimas de cocodrilo",
y en el cúmulo del sigilo,
tomar licor y dinero malgastar...

Siempre oliendo a licor y nicotina,
siempre ebrio con amigos de cantina.

Cuando el cardio latía,
¡manía!...
La nostálgia no piensa,
¡me tensa!...
lloré con certitud,
¡virtud!...
*
Llorar y aún más llorar será el propósito,
¡apósito!...
esas lágrimas que no me dejan ver,
¡llover!...
todas las penas son una dictadura,
¡locura!...
el nácar, la sal y el aceite quitar,
¡llorar!...
*
y al final te olvidaré,
¡te amé!...
desglosar y hasta hartar,
¡rogar!...
y yo me vaya a dormir,
¡morir!...
rosas, dalias y las flores,
¡colores!...
y así amar y más amar
¡¡¡llorar!!!.

¡Qué nos importa!
aquel recuerdo
libre de honra
que llevo dentro.

Amantes han
sido olvidados;
antiguo aro,
y se amarán...

¡Qué nos importa!
aún en duelos;
falsos veleros
en yate aborda...

¡Qué nos importa!
si es que al final
solo es casual
que el amor, corta...

Un soñador
que pierde el sueño
¡flor de veneno!
¡sin corazón!

¡Qué nos importa!
si amar, ¡exhorta!

Allí va el mendigo,
risas y dientes de choclo,
allá va ese loco
que nunca recibió cariño...

El aspecto menesteroso y lacra,
los ademanes y memez,
cabellos con barro y sucia tez;
allá va, el que con dedos dispara...

Allí va el loco salvaje,
lanzando piedras y saetas;
enjuto como una marioneta
que todos lo tratan con ultraje...

Estrepitosamente fastidio del quicio
que rompe ventanas sin piedad;
mendigo, la misma fealdad,
sin juicio, sin dinero, sin oficio...

Allí va el mendigo casi desnudo
sin querer, cantando una alabanza,
allí va el mendigo sin esperanza;
lerdo, su alma no es oscuro....

allí va el mendigo limosnero
de aquí para allá como un pasajero.

Pasado ya los diversos abriles,
recuerdo detenidamente
el deseo recurrente,
esos años inocentes e infantiles...

Como en Perú y las quenas
que inmortalizan El Condor Pasa...
y el tiempo ¡cómo avanza!
como las corrientes de arena...
Yo la amé en dispendio,
deseo como sea esmeler
el recuerdo que toco perder,
esto que ya no está aconteciendo.

La amé sí, aquí, en Perú,
más que a mi mismo
y más allá del altruismo,
y siempre le decía: ¡¡i love you!!

Hoy le escribo exagerando algo,
mis manos resbalan como jabones,
mi vista como intermitentes chispones,
y en mi lomo está ése dilatante lumbargo.

Yo la amé desde niño,
febril o con cefalea,
amarla era mi tarea...
y nervioso, fingí estar tranquilo...

Yo la amé y pocos lo saben
idolatré su nombre corto,
me porté como un tonto
como muchos lo hacen...

Yo la amé desde niño,
el dulce y salobre rostro
aunque ella ande con otro,
y no vale aquí la plata y el oro,
¡la amo como si recién la hubiese conocido!

Princesa del anochecer
que teje en bordados de oro
las alfombras doradas, y solo
para su rostro embellecer...

princesa que no quiere ser reina,
los años cobran facturas,
se lleva la hermosura
donde el espejo gobierna...

princesa pisa y manda
los corazones en zozobra,
escucha los cantos en su alcoba
quebrando amores por donde anda...

princesa tan valiosa,
es la fofosidad de su piel,
"la belleza misma de oropel"
como los pétalos de flores olorosas...

princesa que cabalga en corcel
viene en prendas y corona,
vive en la gran casona...
y a pesar de ser como la miel
¡la princesa por un amor llora!

Me endulza cada molécula
que compone tu matería,
en H2O puro que componía
los vergeles en harina de fécula...

pequeño y abundante he amado
como la contracción de numero de Avogrado,
hidrógeno, oxígeno y... dopamina,
entre el torrente de malicia y felonía
que silva en la ocarina
de la más neta melodía...

tu materia en color
se vuelve loco y osado,
la velocidad de la luz ha alcanzado
aquellas tácticas de amor...

me endulza tus 21 gramos de alma
y cada compuesto químico,
cada parte de ti...
del modo empírico
y el carbono que cuenta tu drama
yo solo amo ¡cada parte de ti!

Dos triángulos puntiagudos,
ojitos de canicas brillosas,
lengua color rosa
¡monarca de los gatunos!

Naturaleza de oscuridad,
carácter fructuoso y ermitaño...
inquieto es mi gato,
salta que parece que quiere volar.

Noctámbulo amante de roedores
marca territorio y es celoso,
su cola parece un árbol navideño,
sus garras como espuela dan arañones,
ni piedad hay por su dueño..
y así queremos al acicalado pulgoso..

Cuánta alegría da el minino,
el atleta del hogar,
bolas de pelos de lino,
solo quiere comer y maullar.

Quién como el silvestris catus,
nunca está triste,
solo dice: miau, miauuuu....
qué grande está ¡¡ creciste!!..

Es hora de conocer gatitas,
cuídate de ellas
tienen todas las agallas;
ellas siempre te arañan
y dolor luego gritas
así que huye pon donde puedas....

Gato el consentido
el que jamás trabaja,
el terrible glotón,
¡ventura que la rutina relaja!...
le gusta las caricias y masajes:
¡bolita de algodón!;
el agua repele tu pelaje
¡gatito, venturanza del corazón!

Pareces una obra de arte de Picasso
por tus geométricas formas;
fiero, ermitaño ¡qué importa!
queremos tenerte en brazos como un niñero
como un bebé fiero y...¡¡lindo!!