El blog de Abrahám Emilio (Todos los derechos reservados)

El abrazo es un vapor que desaparece,
la nostalgia es el amor platónico,
el tiempo el corazón endurece...
ya no seré otro, más bien único.

De vez en cuando se tropiezan caminos,
la casualidad sea la nostalgia,
tal vez amar no sea el destino,
tal vez se sueñe esta falacia.

Ay, ay, ay nostalgia mía,
me besas en las pesadillas,
mi cabeza loca desmaya en tu almohada,
duermo allí, a la voz de tu tonada.

Ay nostalgia, desesperación,
ay nostalgia mía, llena de confusión,
ay nostalgia, mi amor platónico,
te sueño aunque no tengas forma,
recitas un verso hiriente e irónico,
si me niegas, ya nada importa.

Los brazos son un vapor que desaparecen
quizás no existan y sea mi imaginación
como un espejismo de oración,
nostalgia mía, mi corazón endureces.

Nostalgia caricatura mía de elegías...
te robas mi alegría y me das,
penas que jamás acabarían.

Vuelen alas arqueadas,
absorban profundamente el polen,
vuelvan absurdas a las andadas,
vuelvan al estrépito desorden.

El gorgojo de ojos gigantes,
panza gorda llena de sangre
contagiosa en cercanía,
escurridiza, fea y sin simpatía.

Ay, que dolor de ese adiós,
uña y dedo son separados,
quema fuerte el sol la cabeza calva
infortunio de quien nadie se salva.

La saliva de los rosados arcos,
el sin dientes de los pozos,
y ese deseo insaciable,
ella, se va, deja a su esposo...
convivir no es rentable:
insectos atrapados en sacos.

Bordan a 360º los platillos musicales
encienden candelas apagadas,
la cabeza señala los flancos del horizonte,
el ruido es fresco y venerable
y en cierta forma apacible...
pero no se puede escalar,
ese cuerpo ni sus montes.

Invisible e inevitable abandono,
donde el hombres es piedra, ya no, lodo;
y muere como flor sin abono,
y se pierde sin darlo y quedarse solo,
es un brazo partido por el codo.

El maniquí como si fuese nube
gotea, ay gotea agua,
la fuerza centrífuga bloque los sentidos,
y el desespero a la cabeza sube,
es una impotencia del reprimido,
es una lluvia, es una garúa...

El diminuto motor de los dientes,
profieren aires bohémicos,
ay, bastones que caminan solos,
los globos blancos necesitan lentes,
el abandono tiene cierre hermético
y son tan indescifrables sus fuentes.

Se va en una casa rodante,
o un halcón metálico,
o sino a pasos acelerados,
ese abandono es un viejo errante
fuerte y a veces flemático,
es como una apuesta al tiro de dados.

Se desprenden las uñas,
el gorgojo está aplastado,
ya no giran esos platillos musicales,
el oro pierde su brillo dorado,
y con su fluidez todos acuñan;
abandono y sus crueles tonalidades.

La lengua, los ojos, el cuerpo
materias presentes del adiós,
y solo basta una súplica, terco y terco,
el abandono, donde uno ya no es uno
sino desde ahora son dos.

¡Oh señor! apiádate del infortunio,
duele la vida en hipocondría,
reí tanto en mayo, y sollozo en junio,
espero la parusía, si a esto llamas vida.

Barriendo el piso me hallas,
sino caminando solo por las calles,
en tu palabra mi voz se calla
en mi oración te hallé,
impide que me vaya.

Esta tierra de hedor,
no merece orar por Cristo redentor,
su castigo por benevolente fue la cruz
¡apiádate!... danos tu perdón y tu luz.

¡Oh dios mío!... todo reina en el mal,
soy insufrible por aquello,
pues el pecado es abismal...
gracias Dios… por tu luz y tu cielo.

Mira esa rosa encadenada
como unta sus filosas espinas,
míralo bien, esa rosa encarnada,
rojas como venas de las retinas.

Cuenta las estrellas, ¡oh girasol!,
palidece florcita de ornato,
gira y gira como caracol,
suspira a mi amor innato.

Calibra tu reloj a mi pulso,
vive conmigo al unisonó,
soy un amigo, no un intruso,
si soy un rey, lo mío es tu trono.

Camina, camina, camina...
trotando allí suspiro de mujer
¿eres acaso tú mi consentida?...
eres andrógeno a mi parecer.

Mira esa rosa encarnada,
el girasol con su polen de chispas,
mira mi rosa encarnada
mira el tiempo de rubíes y amatistas,,
suspiro de mujer: mi princesa que no sabe nada..

No soy un poeta,
¡qué gran mentira!,
Octavio paz, Neruda o Vallejo,
a sus poemas estoy lejos;
son vibraciones de guitarras y liras,
ellos sí que son poetas.

La desilusión tocó,
a veces soy filántropo
y a veces narcisista,
son repetitivas mis rimas,
tontas como un cuadrado sin aristas,
no tiene el sonido único que mima.

No soy un escritor,
solo desahogo mis resentimientos
porque es terapia para el alivio,
no soy poeta, solo escribo remordimientos,
y soy un desafortunado en el amor,
alguien que siente que todo lo vivió.

No soy un poeta,
finjo amistad en mi misantropía
afirmo aún cuando quiera negarlo,
soy el farsante que apoya tetras,
soy noble, pero repleto de cobardía
y mis poesías no me atrevo a recitarlos.

Yo no soy un poeta,
me escondo en un apelativo,
y solo me consuela la luz del horizonte
el destino es cruel y reta,
tal vez de negarlo este incentivo,
cada día es un enorme golpe.

Jamás seré un poeta,
no sé pelear...
mis dedos ansiosos escriben,
tergiversan cada palabra, cada letra,
porque a la vida no puedo ganar
y en la desgracia, nada se recibe.

Soy joven, pero estoy cansado,
aún no tengo ninguna cana,
inevitable es alguna arruga en mi cara
y tanto y tanto, poco he alcanzado.

Yo no soy un poeta,
palabras que se repiten
que no emiten sentimientos,
mis palabras son coquetas
y al amor describe,
tal vez sea por un juramento.

Yo no soy poeta,
presiento que hoy es mi último día
y nada ni nadie me recordarían
y aquí en espíritu dolido,
se encoje y se agranda esta grieta
jamás seré poeta,
me digo y me afirma el destino

En una distancia,
las praderas donde te escondes
y en el cielo donde te hayas,
te amaré hasta la última descendencia
te amaré aunque te vayas,
te amaré en abundancia.

Imaginaré tu mirar del lloro,
oiré tu timbre tierno y sonoro
y tu calor me abandonará,
frío estará el cuerpo
te amaré toda la vida,
aunque desde ya agonice
o haya muerto.

En la desnudez de tu ser
en tu belleza pura
que no puedo creer,
en la carencia de humor y desánimo,
en tu sollozado futuro
en tus lágrimas me calcino;
sandeces que ponen el corazón duro.

Te amaré toda mi vida
aunque tus plantitas no sean mías,
aunque otro haya calado tu cuerpo y alma
aunque siempre me des la espalda,
si fuésemos uno, dichoso sería,
pero injustamente,
maldición, no separa esa vitrina.

No puedo negarlo,
la migraña me atormenta,
lo preciado de mí muere,
olvidarte es una penitencia,
olvidarte es un sacrificio;
no lo sé…este orate más te quiere.

Tus frutos son prohibidos sin notarlos
y como metal a tu imán se adhiere;
te amaré toda la vida sin pensarlo.

Te encuentre o no,
palpe tu delicado rostro,
estreche tus manos de cristal,
y si no fuese tan pronto
si el tiempo hubiese congelado;
ahora entiendo que así, no volveré a amar.

En la cercanía
que me aleja de ti,
en tu fuego al rojo vivo
te olvidas de mí,
y que cada noche yo te escribo
una frase de amor o poesía;
te enseño mi transparencia.

Te amaré toda la vida
y en mi cabeza te llevaré,
recuerdos de los lugares por donde caminé;
eres mi inspiración,
eres una dádiva.

Qué tiene sentido, qué importa
un masoquista que se auto-flagela,
un desilusionado fantoche
que te recuerda cada noche;
es el amor que exhorta
es esto toda la verdad,
pues mi palabra no exagera.

Te amaré toda la vida
si es piadoso y pecado,
si tal vez sea idolatría
y me haya negado;
amar, no tiene nada de malo,
pero si lo es, me he condenado.

Te amaré toda la vida,
te amaré hasta la eternidad
porque eres verdad, eres alegría.

El pincel tiene cabello crespo
solo pintó un fragmento, falta el resto;
el sol se olvidó de su retrato,
aquel cuadro pintado con lágrimas y sangre;
el pincel ya no pinta, sufre maltrato,
aborrece lo oscuro, sólo quiere retratarme.

El pintor sin talento,
se consterna por su trabajo lento,
tira la pintura muy afanoso
visiona la perfección de su cuadro,
visualiza: ¡ese cuadro será glorioso¡,
allí día y noche pintando arduo.

El pincel es enemigo del pintor
pues sólo pinta el exterior
y lo de adentro no le importa.
puede pintar mi corazón; pero no el amor.

Adiós eterno pájaro cantor,
adiós para siempre y con este ardor
me despido, buenas noches;
adiós, pájaro amarillo claro,
son tantos años y aún no me conoces
y siempre fui integro y algo malo.

Adiós, te digo adiós,
no volveré a escuchar la compasión
vibrará tu voz aquí...
alocará la fe y el débil escudo,
ya morí y por ti reviví,
pero este adiós es salvaje y duro.

Qué importa si te hablo,
te puedo decir esto en mi vocablo
revelarte mi hipocresía,
y esta hermandad infinita
decirte toda mi verdad y sin ironía,
aunque ya no seas, ella, la bonita.

Adiós, te digo adiós
ya pasó una segundo, una hora
te digo adiós aunque es muy precoz
pero mi orgullo no perdona.

Te digo adiós, adiós
adiós pajarito cuculí
este cariño no es para mí,
sino para los dos,
sólo me queda decirte adiós.

Cuando se ama a una mujer,
es la consistencia agridulce
aferrarse al querer,
como la emoción que la tristeza cubre.

Cuando se ama a una mujer
se medita y piensa en ella
se ilusiona; repleto de fidelidad
verla feliz y querer aún más saber
y entender por qué es aún más bella.

La vez desde lejos...
y en la soledad su rostro en el espejo
y cuan innatas palabras de amor
son predilectas las historias amorosas,
el corazón enamorado entiende el esplendor,
solo el amor conoce estas cosas.

Cuando un hombre ama a una mujer,
musa de inspiración...
es el clamado silencioso del latido,
es la cábala, y más que eso: inspiración,
es vivir ahora sintiendo el ayer
es alegrarse por un beso acontecido.

No hay licor más amargo,
mi escozor que pueda
no existe una palabra, solo un susurro,
solo interesa que ella también te quiera
despertar de ese letargo,
eso es amor y… ¡no lo dudo!

Ay de nosotros el decir ¡te amo!
que te abrase a lo salvaje y dócil,
cuando la ves te sientes raro,
y lo imposible se vuelve fácil.

Cuando se ama a una mujer
cuando el sentimiento es correspondido
cuando ya no hay pena y germina la alegría,
cuando te vuelves un cauteloso bandido,
te ínsita a levantarte de cualquier caída
solo, si se ama a una mujer.

Cuando se ama a una mujer
amor, pena, melancolía y desdén,
celos, inseguridad y desatino
pero los ojos solo ven ese único querer
solo si se ama a una mujer,
que es uva de un amargo vino
eso es todo… es amar a una mujer.

Sé que falla en los días
y que poco a poco te enfermas más,
eres masoquista y te encanta el dolor,
eres amigo de las desilusiones
y sientes que te desalmas,
pero sigues allí, donde nadie te quiere.

Aquella ausencia,
y la vida que va en contra;
sé corazón que eres como un puño
y tienes vida propia,
sabes que nada de ella es tuyo
pero persigues aquella ilusión,
vives en el pasado y no entiendes,
que el pasado jamás volverá.

Cabeza loca que cree y se deja llevar
que se olvida de las huellas que deja las heridas
y que no sanan en un día.

Tonto, pero resentido corazón,
navegas en un mar de locuras
piensas en encontrar un nuevo amor,
pero te olvidas de los días
esos donde juraste jamás volver a querer.

¿Que quieres?...
acaso existe un lugar perfecto
donde los sueños son reales,
y que la vida sea mejor que el paraíso,
buscas siempre un amor predilecto,
pero entiendo que buscas y no te rindes
porque enamorado el mundo te hizo.

Comprendo, que eres un corazón humano,
que sólo haces tu trabajo,
pero te enfermas repentinamente,
no te quiero verte así,
comprendo que muchas veces te ves menospreciado
y acto seguido caes en el vicio
y eres presa del amor.

Tonto, tonto corazón
sé que te sientes solo,
y que tienes vida propia
pero es mejor así, sentir desilusión
ya que el mundo tu suerte te robo,
y se ríe de lo tonto que pareces
y sé que con cada desilusión,
sufres más y más padeces.

Tonto, tonto corazón,
no te sientas apenado,
estoy seguro que pronto te enamorarás
a pesar de las congojas,
algún día serás premiado
porque a alguien especial encontrarás.

Tonto corazón ten paciencia
y no pienses en el pasado,
calma y no sangres,
entiendo que eres delicado
pero resistes inmensas penas,
porque eres desdichado
el mundo nunca te ha amado
y por eso te da la espalda,
pero siempre conserva esa idea
de que no eres el único que sufre.

Tonto corazón, no maldigas los días
muchos darían todo por tan sólo
querer vivir una hora más,
corazón no desangres,
corazón mío, desilusionado y resentido
sabes todo lo que has sentido,
desde una limitado alegría y
hasta la pérdida de un pariente,
y aún así lates vivamente,
no te das por vencido.

Corazón mío, eres tan desdichado
sé que pronto no estarás solo
y ahora vagas en la oscuridad,
reconozco que te crecen alas
y serás como un amuleto
capaz de atraer miradas,
porque estás hecho de bondad
e infinito amor.

Corazón, tonto, tonto corazón
ya no llores, me tienes a mí,
recuerda que somos únicos,
y si tú sufres yo también lo hago
y ambos acercamos nuestra vida a su fin,
ten más paciencia
sigue adelante, no te tortures
cree en mis palabras.

Tonto corazón, crees que para ti es fácil,
al contrario, yo padezco más que tú,
eres mi mejor amigo.
formas parte de mí, jamás te podre odiar,
por eso te digo no llores,
ya no sufras… ¡te lo imploro!.

Tonto corazón, no estés triste,
sueña conmigo… recuerdo que
los dos somos desafortunados,
¿qué podemos hacer?,
el mundo nos hizo así;
te quiero tanto corazón mío,
que te digo con mi último aliento
nunca dejes de latir:
mi vida solo depende de ti.

En la intimidad estrechas su mano
pobre de ti insensato,
otorgas tu amor, mentiroso,
te escondes en fotos falsas,
te llevas de su corazón un trozo
y ya hostigaste las esperanzas.

Insensato, palabritas de mentiras,
te aprovechas de mi caliginefobia,
insensato de rudas puñaladas
palabras tuyas que agobian,
¿ella es tu gemela?... ¡adivina!.

Acaso no notas su rubor,
le demuestras mentiras y amor,
tú eres su oscuridad sin luz,
tú eres de mentira, aborreces la verdad,
detrás de ti, me guardas rencor.

Ja, ja, ja, ja… me río,
snif snif snif… suspiro,
ay, ay, ay… lloro y lloro,
insensato si fueras otro,
porque esos besos no son míos,
esos besos son mi tesoro,
estoy fuera de su puerta;
soy un residuo de su vida
un fruta podrida que se patea,
un diente caído.

Se terminó la guerra
y tienes razón, ya perdí,
insensato yo la quiero, me apena
por ella casi todo lo dí,
pero por lo bueno; también hay condena.

Insensato, si sintieras su beldad,
si en un disco oirías su tristeza,
si la hubieras conocido de niña,
si tus sentimientos fueran de verdad,
si soñando dibujaras su rostro espiritual
y la describieras en tintas,
oirías en silencio sus palabras
e interpretarías los mensajes de su corazón,
si al despertar fuera ayer…
si tú fueras su alma, su emoción…

El camino está preparado,
las piedras fueron removidas
sus heridas cicatrizaron;
insensato, yo soy su consentido
no entiendes en ti ve mi reflejo,
sólo que yo estoy muy, muy lejos,
insensato, ni de mirarla eres digno,
ja, ja, ja… estrechas su mano,
y besas los labios anhelados;
ella reclama mi presencia
es que ya perdí la vida,
insensato… quizás no le des tú
el amor que yo le he regalado.

Brilla estrella pálida...
bésame, te noto fría y cálida,
brilla como las pupilas,
ante mis pies deja que las mire y combata...
brilla como del sol una corona amarilla,
dame el beso en el calor de tu fogata.
Duerme luna, amiga lejana,
amo tu inocencia casi humana
tu color azul refleja mi vista llorosa;
astro que conoces mi rencor
te vuelves dulce y a veces melosa,
solo tú conoces mi escozor.

Tiempo que te vas,
que te llevas las alegrías y heridas
ayer estuviste aquí, hoy te marchas
arreglando tu eterno equipaje
pues a ti te traje, penas tan anchas.

Vuela pájaro de la paz,
vuela allá y aquí y sin más,
dile al viento que me dé su calor confortante
y al agua cristalina que lave mi alma,
al espíritu de bondad, me haga importante
y al destino que lea mis palmas.
Ojos míos que flotan en sangre,
deslizándose ansiosas en su imaginario baile,
cabeza mía, de finita sabiduría,
ángel que guardas de mi persona,
dios eterno que conoces mi melancolía,
sólo eres tú quien me perdona.

Mascota mía, animal compañero,
ya no vives, siento que muero
alma inocente y pura
sueños en punto de quiebre
mi alma es inocente y la vez oscura,
soy malo, bueno; nadie me entiende.

Se pudo haber sentido miedo
el amarte, pero más te quiero,
por más que cante el latido,
por más que te odie tanto,
presiento que llega ese amor santo
que me besa y consuela mi llanto.

No puedo golpear el aire
ni saber lo que la vida me trae,
no sabré qué será mi futuro
ignoro si viviré al desmayarse el día,
nunca dejaré de amarte, estoy seguro
y si eso es fallecer, ahorita moriría.
No tengo nada de dinero
sólo un amor real: verdadero,
tengo miedo perderte
lloro al imaginar no verte,
imploro a los ángeles del cielo
y río y canto, pues pude conocerte.
Este sentimiento es gigante,
esta hecho de amor desbordante;
mi cuerpo envejece y pierdo la memoria
soy loco, cuerdo y a veces cobarde
pero siento el deseo y la euforia
que corre apresurado en mi sangre.

Por eso luna, sol, mascota y amor,
solo les pido un favor,
sean el camino que me dio dios;
amor, mujer y ternura
si su querer es caro, pagaré su usura.

Nunca descansa el sueño,
puesto la intención puro y obsceno,
encarcelado en jaula de arrogancia
ligado al azar de eso superficial,
tocando la aurora en la distancia
y sorpresa, cae todo por gravedad.

*
Los dedos se juntan: están enamorados,
fervientes, incrédulos y algo enajenados
una palma fría, la otra como lava
un dedo en el calor infernal,
otra fría viendo la luz del alba,
ambas agradables, sabrosas llenas de sal.

*
Solitario queso que junta los dedos,
golpea su cabeza de algodón
aún en exceso de razón, ¡está lelo¡
porque extraña de la palma esa loción.

1 kilómetro al colegio y un paso
un rastro que el olfato percibe
una rosa que por ella ríe, llora;
estando afuera, su ventana,
ya casi tanto años
y de ella no sabemos sabe nada.

1 kilómetro del pasado y medio paso
se tele -transporta al ayer,
y se contará muriendo esos años:
-Era el alcohol soberano del hogar
las lisuras: la mermelada;
las obscenidades, criatura misma
de una etapa: pubertad.

El cuerpo mutante de niñez,
el bello de la cara y el acné,
y comenzando a ver a chicas muy ruborizado
con otros ojos a ella.

El miedo por una reciente vida,
rescoldo del primer amor platónico
aquella que se fue a otro colegio,
y pensando: ¿qué será de nosotros sin ella?

Un nuevo paréntesis y ver
lo cercano irse al fin del mundo,
con abundantes amigos y escasa ilusión
disimular en otra mujer eso,
aquel amor de niñez. ¡Qué pena!.

Pero ante el dolor familiar
la falta de dinero… y el miedo
existió una sombra que fue luz
esa que cambió la vida
aquella silueta que le debemos todo
porque sin ella, no fuéramos el yo…

Tímidos, inexpertos y enamorados,
le dimos una moneda de suerte
también una carta ilegible,
y un poema inspirado pero soso
y ante a la ansiedad a lo loco
vencimos aquel miedo.

Nos hicimos casi amigos,
sólo le contábamos la ilusión y penas,
un amigo nos ayudaba a enamorarla
era el pretexto para no faltar
jamás faltar a clases.

Rulos de serpentinas que decoraban
su rostro de ángel y diabla,
una silueta perfecta del soñar,
la voz de sirena… ¡sirena nuestra!
ella, un poema de amor
hecha la mujer de fantasías.

Ojos achinados o grandes, belleza total,
perfecta, perfecta era ella
jamás diremos su nombre
pues un poesía tonta
no merece nombrarla.

Más de 10000 poemas por ella,
un millón de líneas por ella,
tantos años pensando en ella
y toda la vida: nuestra doncella.

Jamás ni en amnesia ni Alzheimer
olvidaremos aquel julio cuando la vimos
ese momento no le dimos importancia
y la semana posterior,
sus prendas y su maquillaje,
volvieron tonto a cualquier inculto.

Por esa mujer: hemos soñado,
gracias a ella: escribimos, pero lloramos
a su inspiración: plasmamos todo
y por ella: vamos suspirando.

Puede que jamás la encontremos,
el fruto es rasguño cicatrizado,
el ayer vino amargo sin dulce;
es el amor que no se ve
pero como maldición se siente.

Los pensamientos eran de pureza,
las sonrisas eran nerviosismos,
y un infinito temor de declararse
y negar así mismo, y enamorarse.

Querer, amar, adorar y…
no hay palabra más fuerte,
no existe palabra que viva
pero si vida que existe.

Esperarla fuera del colegio,
cualquier coartada era perfecta,
nunca fuimos tan simpáticos, ni regios
pero estábamos allí
enamorado en el sacrilegio.

Quizás hayan sido pocos meses,
pero transfiguran hasta hoy
cada segundo y verla era suficiente,
en las horas libres caminando
por su casa y verla asomándose
en su ventana que refleja mi rostro
porque aquella casa sabe nuestra historia
y conoce paso a paso nuestras huellas.

¿Qué se podía pedir?...
dinero, felicidad, salud y suerte,
su presencia valía más que ello
los huesos se pulverizaban,
andar y reírse con nosotros
tal vez habíamos expirado y, estábamos
en el paraíso… pero ¡estábamos vivo!

Sus burlas y dobles sentidos
que se mofaban de nuestra persona
y la coquetería de hidalgo,
creaban en si un poeta
y aún más: un solitario.

Ella también sufría
el pasado era la huella oscura
y sufrió más que nosotros,
aplacaba su vergüenza en
flascas sonrisas hipócritas,
pero la adorábamos tal cual,
para nosotros era ella, perfecta
sí ella, ella, ella y solo ella.

Aún hoy se lamentan las tonterías
y el infortunio que da la vida,
enterarse que jamás volverá
y si volviera, nunca…
nunca será ella, a quien conocimos.

2 kilómetros de ahora al colegio,
pero su hogar ¿dónde será?
ni siquiera de nosotros se acordará,
al menos cosecho un poeta
construyó un solitario que sufre,
tal vez enamorarnos nos cambio.

Adoramos esos años,
amamos y damos la vida por ese segundo,
pero somos un loco
que se sienta y tira piedras
imaginando que golpea al destino
y aceptar que no fue nuestro camino.

Fue una sola vez que los ojos
brillaron de esa manera,
fue raro el sentir celos
y tensionante el verla y hablarle;
era ese la joya: el premio.

Ya nada existe, son muchos años
y la vida cambia… tal vez
alguien comprenda esto
y otro viéndome como perdedores
se ríe en nuestra cara si le contamos
la historia del primer amor colegial..

*
Declaro al miedo que te quiero
tu mirada salvaje me destroza
confieso que no eres bella, eres preciosa.

Unas insignificantes palabras para ti amiga
un vocablo que por ti florece,
entre las palabras de intriga que entristece.

Mi corazón late a mil y está loco
este corazón se abre como flor
sal despacio, a tu amor toco.

En el recíproco talento
en mi insípido lamento
me siento alegre y de verdad.

Confieso despacio a tu oído
que solo por ti vivo, muñeca mía,
aunque al decirlo gane tu odio
y sufra toda mi vida está melancolía.

*
Te imagino volar: mi ángel
te imagino en el cielo: ojos de nube,
te veo en los cuadros, pintadas de pincel
te despides al cielo subes
pero aún no sabes que yo soy él.

Ignoro tu vida y sentir,
bienaventurado el día que te conocí
contándole a la noche nuestro secreto
con las promesa y juramentos
y toca mi pecho, los recuerdo están aquí.

vuelva al frío tu calor
germina esta semilla en tus manos,
porque este humano, es de puro amor.

Va mi ser a tu búsqueda
acelerado y desesperado a tu encuentro;
es que todavía queda este sentimiento.

*
Es tan fuerte el deseo de soñarte
y el amor neto sólo a ti regalarte,
llegar al infinito de tu persona
arrancarle suspiros a tu alma resentida,
colocar en tu cabeza unas flores y corona
para que me ames toda la vida.

Deseo fuerte presionar tus manos
darte palabras de consuelo,
aunque siempre seré sólo un hermano
y si acaba este sentir, me muero.

Abandonarlo todo por solo verte amiga
porque a la ilusión, encamina
a tu ojos, labios, boca y demás
es un laberinto que es al conocerte,
al lugar donde llegaré jamás
porque eterno es el cariño latente.