El blog de María Cruz Pérez Moreno -Acnamalas-

Miedo tengo a quedarme sola en casa
el siempre viene buscando altercado,
todo sale mal, más no es inculpado,
no razona y tapo mi faz con gasa.
Despabilada estoy porque me abrasa
cara cincelada en dolor causado
por mano dura del desvergonzado,
adormilado en la cama me atrasa.
Lloro triste el dolor proporcionado
por sayón tapado en normalidad
en idas a calles con malcarado.
Mi sino es dar con la felicidad
lejos del individuo descarado
que robó y mancilló mi intimidad.


María Cruz Pérez Moreno – acnamalas
Derechos Reservados.
Madrid. España

Caminar sin dar un paso
porque el andar es cansancio.
El paro la desazón
¡Camino largo!

Meta tras la infelicidad.
¿Quién lo grita?
Si la vida es el andar
unidos en la mentira.

Ese difícil vagar
sin la alegre sonrisa.
Sólo una ironía más
de la mala dicha.


Maria Cruz Pérez Moreno – acnamalas
Derechos reservados
Madrid. España.

Cambios obligados y no deseados,
me consumen,
me duelen,
me estremecen.

Son decididos en estamentos altos,
no consultan,
no preguntan,
no escuchan.

Doy con personas de deseos ocultos,
me intimidan,
me vigilan,
me juzgan.

De un lado a otro insegura, con tiento,
no soy,
no tengo,
no puedo.

Pasar los días para recuperar el sosiego,
mi aliento,
mi espacio,
mi tiempo.

Tengo fe en mis silencios.
Obtengo sonrisas y apoyos.
Creo, pienso y deseo
estemos todos contentos.


María Cruz Pérez Moreno - acnamalas
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Madrid. España.

Deshojo margaritas con el sí y el no
en tardes primaverales,
bellos paseos en soledad
contigo en mi pensamiento.
No admito el no, hago trampas
a sabiendas de mi propio engaño,
sonrío dichosa por tan burda mentira,
logro el íntimo recuento final del sí.
Me siento niña y no lo soy.
Me encuentro amada y no lo sé.
Me río de mi fantasía de gran mujer
que juega a ser feliz sin saber.
Vuelvo al cuento de la margarita,
historia interminable del no y el sí.
Como la vida en negro y blanco
sin gama de grises que apenan,
afean el lienzo entrelazado de deseos.
Sueños de margaritas del sí
porque el no, se ha diluido en tiempos.
Soy yo que paseo , te quiero , te siento.

María Cruz Pérez Moreno - acnamalas
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Creo que siempre estamos capacitados para el amor sin importar la edad,
es bueno llenar el alma de suspiros.

María Cruz Pérez Moreno – acnamalas -

Seremos laguna llena,
esperanza y sin penas
Tú, mi eterna lejanía.
Tú, la inmensa alegría.

Si supieras vida mía
cuan triste paso el día
añorando compañía,
sin tardanza vendrías
a ocupar mis largas horas
de paz, amor y risas.

Seremos campo florido,
cuidado y embellecido.
Tú, mi cariño perpetuo.
Tú, mi amor verdadero.


Maria Cruz Pérez Moreno - acnamalaS
Derechos reservados
Madrid. España

Soy muy débil señor
no puedo continuar,
todo me sale mal,
no encuentro la verdad,
no vivo con la paz.

Hoy me siento morir.
Hoy no quiero vivir.
Necesito reír.
Preciso estar feliz.

Aléjame de aquí
Aproxímame a ti
permíteme vivir
sin sentir el sufrir


Maria Cruz Pérez Moreno - acnamalaS
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Madrid. España.

Te quiero.
Aventuremos el futuro
no acabado.

Soy hielo fundido
en verano.
Manantial escarlatina
en primavera.
Agua estancada
en invierno.
Neblina del día
en otoño.
Ojos frágiles a lágrimas
sin verdadera causa,
por todo y nada.

Te amo.
Estoy prendada,
seducida, enamorada.

María Cruz Pérez Moreno - acnamalaS
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Madrid. España.

Déjame
que quiera llorar mi pérdida.
Déjame
que agote hasta el fin mis lágrimas.

Es difícil
remontar de nuevo,
vivir un nuevo amor,
encontrar la esperanza.
Es difícil
que el espejo cambie mi cara,
que no vea los estragos de tu marcha,
que mire mis arrugas marcadas.

Déjame
que quiera llorar mi pérdida.
Déjame
que agote hasta el fin mis lágrimas.
Déjame
necesito estar sola con mi triste estampa.

Es difícil
volver a comenzar con el corazón roto
y la autoestima perdida.
Es difícil
vivir sola en lamentable soledad,
necesitada de risas y alegrías
y solo tengo mis manos vacías.

Déjame
que necesito vivir
y dejar de compadecerme.
Si tú no supiste apreciar mi amor,
espero no verte y que te den desamor.


María Cruz Pérez Moreno - acnamalas.
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Madrid. España.

Silencio, embarga un sutil silencio
en la noche del olvido.
Recuperado amor que en distancia
de días en días,
de faltas obligadas
te has ido,
y me regresas obnubilado,
con sonrisa eternizada
en cara embargada
de suspiros.

Ganan los suspiros,
el roce de uno y otro,
placer que das y doy,
de dos sin miedo.
Te beso,
embelesa tu risa placentera,
el murmullo de jadeos quedos,
te amo,
abrazo tu cuerpo,
duermo en tu hombro, descanso.

Te sueño feliz y enamorado,
juegos de amor sin sosiego,
agotadora la hora del adiós
que con bello ósculo sellamos.
Te amo,
vida de novela eterna,
albores de amaneceres contigo,
siempre,
siempre contigo el deseo,
el ensueño, el ansia, el gozo.

Temor,
miedo al silencio obligado,
que me voy y te marchas,
no estoy y me llamas.
Te adoro,
llega la llamada,
tu llamada en llama
renovada tras la vuelta
de tu vida en mi vida,
del gozo retornado.

Llenar los espacios
de silencios prolongados,
en recursos lujuriosos,
de cuerpos entregados
al amor que lacera los
torsos nuestros,
congelados en deseos
omnipresentes,
de cuerpo con cuerpo, fundidos,
de piel junto a piel, abrazados.

Suspiros, de nuevo
más ardientes suspiros,
dados al unísono,
por estar embriagados
del ansia loca
de dos enamorados,
abrazados,
cuerpos acalorados,
sexo y deseo dado,
me quieres y te amo.

Amantes eternos,
en lejanía y cerca,
dos almas en una,
la tuya y la mía unidas,
selladas a fuego.
Te quiero,
en mi casa y en mi lecho,
en mis alegrías y mis sueños,
en tus dolores y miedos.
Vivamos el amor certero.


María Cruz Pérez Moreno - acnamalaS
Derechos Reservados
Madrid. España.

Anochece
en lo más recóndito del alma
anclada en la nada,
su nada, mi nada,
nuestra insigne nada,
acobarda.

Atrae el insomnio
de noches mojando
la almohada,
lágrimas de rocío
en mañana clara,
que embarga.

Vida llama
de sentimientos ocultos
a las miradas,
de todos, de uno y otro
en el albor
del ánima.

Cándida
asoma la esperanza
de la mano dada.
Te me vas y me voy
al confín de las
sin palabras.

Mentiras
que duelen, nos deniegan,
por ser primero el olvido
y última la primera,
en la vida del apenado
que mendiga y espera.

Sonrisas
entregadas y recibidas
en la quimera de días,
donde la soledad va
a la deriva
de ella, la nuestra.

Felicidad
lograda por la lucha
sin espera ni mentira,
dada a la alegría
de vidas conjuntas,
siempre unidas.


María Cruz Pérez Moreno - acnamalas.
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Madrid. España.

Extraño tu ida a las profundidades de mi alma,
te busco, no encuentro el recuerdo de tu voz,
descubro que los muchos años de tu inexistencia
han borrado el perfil de tu inmaculada cara,
el color de tus ojos, la profundidad de tu mirada.

Y no estas en mi retina, en mis largos días de tristeza.
Y no encuentro tu retrato intacto en la memoria.

Me siento sola, abandonada, pérdida en tu ausencia,
cierro de nuevo los ojos para lograr el momento feliz,
envuelta en tus hermosas historias de fantasía,
logro entrever la mirada expresiva, sin igual,
la que desprendías siempre con tus cuentos sin fin,
inventados al paso del corto lapso dedicado al evento
de quien tiene infinitas tareas y no sosiega,
que logra encontrar los espacios de asueto en nosotros
sus hijos, sus amores eternos, los no perdidos.

Te fuiste en el silencio de intensa noche de espera,
marchaste quedo, durmiendo los sin sabores del tiempo,
las alegrías, las penas, tragedias urdidas en trastienda
por familia usurpadora de lo ajeno, mala compañera,
avaricia, envidia, desafortunada hacienda guardada
a nuestra mirada, daba manzana mala por buena
pera que entregaba a la querida y amada niña,
sus niñas, su estirpe de padres dañinos, egoístas,
con actos maculados, injustos, de manos manchadas.

Y regresas a mi retina, alivias la tristeza de largos días.
Y me reencuentro con tu retrato escondido en la memoria.

Reconfortas con tu bella, imaginada, deseada presencia,
te tengo en mi vida, en mis períodos largos de insomnio,
en mis sueños donde me entrego a tus abrazos y besos.
Posas con amor la mirada, acaricias mi cara con tu cara.
Hermosa madre de mirada clara e inmejorable estampa.


María Cruz Pérez Moreno - acnamalas.
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No siento el dolor de la puñalada
que me parte el corazón y el alma,
siento mucho más que al marchar me digas
que lo nuestro acabó por mis mentiras.

Gran cobarde fuiste uno y mil días,
por escudar malas acciones en idas,
no valor, ningún tesón ni energía en la vida,
sólo has sido títere en sus manos unidas.


María Cruz Pérez Moreno - acnamalas.
Derechos reservados.
Madrid. España.

Sabiéndote cerca y lejos
mi corazón anhelante espera
que una palabra tuya
le devuelva la ilusión,
que sin querer perdió
tras tu silencio inoportuno
y lloro con dolor su infortunio.

¿Crees fácil soportar tu egoísmo?
¿Ves sencillo que yo viva en la alegría?
No amor, todo en si es fantasía.

Realidad son los largos días de soledad
por tu ineficacia en las salidas,
ese incomprensible olvidar,
esas innumerables mentiras,
que yo en mi desear creer
topé con la desconfianza y la duda.
Amor, el no saber no es vida.


María Cruz Pérez Moreno - acnamalas.
Derechos reservados.
Madrid. España.

Pajas agudas, punzantes.
Ríos azules, fatales.
Montañas crueles, volcanes.
Encuentros amistosos, reales.
Son verdades, realidades.

María Cruz Pérez Moreno - acnamalas.
Derechos reservados.
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