Luna ascoltò la sua voce cantare

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Cantaba para mi, cantaba un hombre
y era entonces su voz como leve caricia,
aunque fuese fugaz su presencia fenicia
y ni siquiera supiera con certeza su nombre,

Cada vez que cantaba retumbaba en mi entraña
la secreta pureza de una noche que envicia
y encontré en su mirada de agudeza extraña
el enigma y belleza del amor que es delicia,

Y yo que hace tanto no sentí la primicia
de volverme Lucero levitando en el cielo
baje cual mariposa a posarme en su pelo
y presentí en su fresco labio una rosa novicia.

CANTABA PARA MI, y sin él saberlo
ese auge de voz dulce, su varonil silueta
eran dádiva y manä, numen de un poeta
me penetraba su esencia y su magia de elfo.

Cantaba para mi, y lo escucho aun en silencio...
aunque fuese solamente yo locura breve,
seguirá siendo ángel que muy alto me eleve
aunque sölo su olvido en réquiem providencio.

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