Un adiós

¡Qué pronto se pasa
del vino a la plegaria!
¡Qué efímero
el discurso de la dicha!
¡Qué desnudas las manos,
húmedas del frío del dolor!
Solo la ausencia
desvela esta ceguera
de tronco abatido por el rayo,
solo la tierra,
firme para andar y desandar recuerdos,
mientras ya las palabras
se aprestan a mirar por otros ojos,
y aflora el silencio
como restos de un naufragio.
Un adiós es solo el respirar
entrecortado de una lluvia que se aleja,
el último estertor
de un viento que agoniza,
un para siempre
de un tardío resplandor.

 

Muy bello, sugerentes imagenes y certeras metáforas para una muy hermosa y languida melancolía. Me gustó mucho amigo Xana. Un abrazo. Paco.

 

Un abanico de metáforas e imágenes que crean en conjunto, un melancólico poema. Un placer leer y dejar mis saludos.

 

Muy bellas y tristes letras, gracias por compartir
saludos!

 

sucesos que analizas con mucho atino y con figuras que le dan un toque bello, estético y lúgubre.. muy bonito en verdad Xana

 

Muchas gracias, amigo Paco. Celebro que haya sido de tu agrado.
Un fuerte abrazo.

 

Muy agradecido por tu paso, amigo Joblam, y por tu atento comentario.
Un abrazo.

 

Gracias por tu presencia, amigo Luzyabsenta, y amable comentario.
Un abrazo.

 

Gracias, Soyletras, por dejar tu huella en mis versos.
Un abrazo.

 

me ha encantado su poema


un abrazo fuerte