Un té con limón

En una mano un dolor
en la otra un amor
que fabricaba suspiros
de té con limón,
la vida es bella a ratos
y no siempre nos sonríe,
ella dibujaba soles
en un recuerdo triste
mientras escuchaba a Serrat,
todo tiene un principio y un final,
a veces reímos lágrimas
y otras lloramos carcajadas.

 

Así es la vida mi querido Paquito, tan diversa en el sentir como viento en el aire.
Yo admiro ese poder sanador que desprendes con tus versos, pues ellos traen a nuestro rostro
la reflexión que cuando estamos aturdidos de alegrías o penas no logramos discernir que es que.
Un abrazo para hoy mas el añejado de ayer MUAKSsss

 

Me gusta este poema que nos habla de las dos caras de la moneda, vivir siempre felices es imposible y vivir siempre sufriendo no es vida es otra cosa que no alcanzo a comprender. MMUUAAKKSS a tope de amor maño para mi Mireya, mi maracucha favorita. Paco.