Maestros del Ajedrez.

Se pone la gente,
que pulula por el Cosmos,
a preguntarse, seguramente,
¿ Quién obró el milagro ?


Vespa Velutina, Mandarinia o Crabro.


¿ Cuál pica más fuerte ?
¿ Cuál me mata antes ?
¿ Hay enemigo pequeño ?
¿ Fue el rey David, David el Gnomo ?


Y los muchachos intercambian cromos,


con los cuáles, rellenan álbumes.
Así, atesoran colecciones.
Mientras las animadoras de baloncesto
danzan y agitan sus pompones.


Pues para Forrest Gump,


la vida es como una caja de bombones.
¿ Por qué me pregunto tanto ?
¿ Por qué no avanzo, mientras tanto ?
Y así, adelanto. Indecisión


no es equilibrio.


Escapemos del Corán y de la Biblia.
Salgamos a la luz, afuera
de la caverna de Platón.
Abracemos con la imaginación,





un amor platónico.


Que sea matrimonio y patrimonio,
a un tiempo.
Madre y padre, e hijos-obras.
Cooperación triunfo, trabajando en equipo.


Juntos, al fin, Electra y Edipo.

 

Me alegro mucho, Bristy. ¿ Le has pedido algo a los Reyes Magos ? ¿ Un cojín de color marrón ?





Puedes escoger el que más te guste.
Pero sólo el amarillo contiene una sorpresa.
¡ Oh, vaya, he develado el enigma !
Prometo no volver a abrir la boca.