No voy a llorar

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Muy emotivo poema con esa guía que nos deja una lágrima de alegría pero no voy a llorar..grato leer tu poema Antonio Cuello..saludos cordiales y buena salud

 

Evocativo recorrido de momentos emotivos nos dejan sus poéticos versos amigo. Un gusto pasar por su creación.

 

Muy bonito poema estimado amigo ha sido un placer leerle y dejar mi huella en sus versos,

 

Gracias, viajero de viento, por dejar tu valioso comentario.
Te mando un abrazo de hermano, desde la cálida Valledupar

 

Gracias, Daniel, por pasar y dejar tu grato comentario
Recibe un abrazo sincero desde la cálida y pujante ciudad de Valledupar

 

Gracias, Guadalupe, tu visita siempre será bien recibida por aquí.
Te mando un beso desde la cálida cuna de los acordeones: Valledupar

 

Siento tus letras con una gran fuerza emotiva que llega al alma
como un grito desgarrado que necesita ser oído y atendido. Me
ha gustado leerte, la melancolía se desborda en tus versos.
Besitos por miles en tus mejillas.

 

Gracias, querida Anamer... siempre será gratísimo, recibir tu visita
Te mando una rosa en el viento

 

Es muy realista, y puedo ver que es sincera tu emoción, y sinceramente me emociona.
Me pasa lo mismo, esos pequeños De ja vú que traen algunas personas, dan ganas de llorar.
Clear

 

Los niños corriendo y los recuerdos de cuando todo más simple, y te preguntas, ¿volverá algún día todo a ser normal?, ¿o es un deseo que quedará en mi mente hasta que quizás muera...?
Me encanta...

 

Todos tenemos viajes hacia los recuerdos y allí nos encontramos con rostros de seres amados. A veces llorar alivia, otras no. Siempre es bueno que prevalezca la ternura de los días felices.
Tu poema es conmovedor, fue un gusto pasar por aquí.
Un abrazo, poeta.

 

Gracias, Clear, por tu sensible sinceridad... me agrada mucho tu comentario
Te mando una rosa en el viento y te envío un cálido saludo desde mi Valledupar querida

 

Gracias, Cecilya, me agrada sobre manera que hayas desglosado con tanta sensibilidad y ternura mi poema
Te mando un cálido abrazo desde mi ensoñadora ciudad de Valledupar