Haibun

Cambios

Entre los molinos y un viejo cementerio pasa un dique por el pueblo,
un lugar que se transforma en polders y agua. Durante el desastre
de la gran inundación todos los habitantes fueron evacuados.
Excepto una casa de unos ancianos que quedaba cerca del dique
y que luego sirvió para todo invitado que necesitaba algo.
El sol brilla. Miro hacia el pueblo y el agua. Hay poca cosa para ver
pero los recuerdos quedan sobre el lugar de lo que un día fué.
Por un momento vienen a la mente todas esas imágenes y toman vida.
Momentos excepcionales.

Detrás del dique
un mar de techos rojos -
entre dulce y sal
se mecen los recuerdos
sobre la marejada.

 

Muchas gracias poeta por su lectura y apreciaciones, saludos cordiales

 

Un precioso escrito y una deliciosa descripción, acompañada de un bello poema.Es un Tanka????

 

Gracias María por tus apreciaciones.

 

La sabiduría de saber donde
asentar los cimientos
para que los recuerdos amargos no
prevalezcan.

El tanka quedó espectacular:
Los recuerdos agridulces van y vienen
como las enseñanzas que nos deja la
naturaleza después de un desastre.
Un placer pasar.
Saludo.

 

Muy certeras tus palabras estimada marlene, te agradezco mucho esa gentileza de leerme y más que nada tu comentario que siempre valoro y aprecio, el placer es mío contar con tu presencia, un abrazo